Arquitecto, escultor, pintor, escritor y escenógrafo italiano, fue uno de los más prestigiosos artistas de la Roma Barroca del siglo XVII, realizando importantísimas obras en la capital italiana: ornamentación escultórica del Puente de Sant´Angelo, Columnata en la Plaza de San Pedro del Vaticano, Valdaquino y Cátedra de Pedro, Scala Regia en el Vaticano, fuentes en la Piazza Navona, Iglesia de Sant´Andrea del Quirinale… obras que le han dado el carácter de ciudad escenográfica que todavía posee la "ciudad eterna". Bernini trabajó en perfecta consonancia con la cultura de su tiempo y en su obra aparecen los ideales, mitos y aspiraciones temporales y espirituales que preocupaban a la Italia del XVII. Arquitecto oficial del papado, su trabajo está impregnado del sentimiento meridional europeo, subrayando de forma especial el gusto por lo teatral, lo gestual, el asombro, y la emotividad, buscando la fusión de las artes (escultura, arquitectura y pintura) y el impacto que puede tener esta escenografía para el espectador. Bernini dominó el marco, mostró un gusto especial por el movimiento, desarrolló una predilección por las curvas, por la iluminación dramática y por las experiencias que el público puede sacar en cada una de sus creaciones.