DE ANDA ALANÍS, Enrique X., Candela 1910-1997. El dominio de los límites. Taschen. Colonia, 2009.

p. 63.  "Xochimilco es una población de origen prehistánico al sur de la Ciudad de México. Su rasgo histórico más significativo es haber sido, hasta principiosl del siglo XX, uno de los manantiales más importantes para abastecer de agua dulce a la ciudad. Los manantiales dieron lugar a un lago que los pobladores originales aprovecharon para crear medios de producción agrícola. La técnica inventada por los indígenas consistió en hacer plataformas artificiales de madera que recibían tierra de cultivo, descansando toda la estructura ("chinampa") sobre la superficie del lago; de ahí surgió en mombre indígena del sitio que significa"lugar de los jardines flotantes". Durante todo el siglo XX, Xochimilco fue un sitio de recreo para los habitantes de la Ciudad de México, que fomingo a domingo paseaban en "trajinera" (embarcación de madera exclusiva de Xochimilco) por el lago, recreándose con los "jardines flotantes" y la belleza de un paisaje lacustre único en México. En una lengua de tierra firme a la orilla del lado y frente a las chinampas, Candela reconstruyó un restaurante con una de las estructuras más bellas del siglo XX. El nombre de "Los Manantiales" puede entenderse a partir de la naturaleza del sitio.

El problema arquitectónivo planteado fue la creación de un local para mil personas conuna sala de restaurante, sustituyendo una estructura de madera que había sido consumida por el fuego. La decisión de Candela y sus asociados, fue diseñar una bóveda de planta circular, formada por la intersección de ocho gajos provenientes del encuentro de cuatro Hypars. El resultado fue una especia de nenúfal con apariencia de floración de de cerca de 42 m de diámetro, con hypars de 25x30 m en el inicio de su desarrollo y una altura máxima de 8.25 m, que en el interior se reduce a 5.90 m en la zona más baja del centro. Como muchas veces recordo Candela, el éxito de sus soluciones se debía a la acertada decisión sobre el tipo de figura geométrica que se debía traducir en la membrana de hormigón, así como el cuidado de los detalles con los que resolvía la conexión de esa geometría la tierra. En este caso, la marudez de la intuición tecnológica de Candela le permitió la viga del borde y concentrar la descarga del peso de la estructura en los apoyos de arranque,  que se encuentran remetidos del borde extremo de los paraboloides. Lo que el espectador registra a primera vista es la ondulación de un labio de hormigón que nunca toca tierra y que mantiene un vuelo perenne. Si el efecto conseguido en "la Jacaranda" de Acapulco era sentir la presión del aire marino sobre una membrana que permanecía turgente, en "Los Manantiales", donde no hay brisa marina, el efecto es una suave flotación llena de gracia y parsimonia que parece estar repitiendo en la tercera dimensión, la ondulación de la superficie del lago. Una flor de loto sobre los jardines flotantes de Xochimilco.

"Los Manantiales" es una obra excepcional porque supuso también una especie de vínculo de actitudes yposturas arquitectónicas. Las parábolas frontales que surgieron con la generación de los hypars, se cerraron al exterior con placas de cristal, creando una arquitectura que se vuelve ingrávida al ser dominada por la transparencia. "