Imprimir

CURTIS William. J.  La arquitectura moderna desde 1900. Edit. Phaidon. Hong Kong, 2006.


Págs. 87-97.“Los ideales del Arts & Cradts en Gran Bretaña y los Estados Unidos” 


Es natural comenzar la historia en Gran Bretaiia con el legado de los ideales de la arquitectura domestica transmitidos desde Webb, Richard Norman Shaw Godwin y Arthur Heygate Mackmurd, o hasta generación posterior que incluye a Mackay Hugh Baillie Scott, Edward Prior, Mackintosh, Charles Robert Ashbee y William Richard Lethaby,Charles Francis Annesley Voysey...


Charles Francis Annesley Voysey nacio en 1857 y creció su estilo propio y original justamente antes del fin de siglo en proyectos como el de una casa en Bedford Park (1890-1891) o el de un estudio en St. Dunstan's Road, West Kensington, del mismo ario. En ellos, el efecto estético nacía de la disposición de volúmenes simples salpicados de piedras y encalados, perforados por hileras de ventanas y realzados por el juego geométrico de las chimeneas y los tejados de poca inclinación. No es difícil comprender que los historiadores formalistas que buscaban una genealogía para las formas blancas y desnudas de la arquitectura moderna posterior se hayan vuelto hacia Boyes; sin embargo, el arquitecto expresó su perplejidad al tener sobre el la responsabilidad de ese papel de `pionero del diseño moderno'. El hecho de estar inmerso en los sencillos placeres del diseño vernáculo inglés, su falta de ostentación y su obsesión casi infantil por la composición de los canalones y las bajantes en las fachadas tienen muy poco en común con las ideas de una generación posterior para la que la simplicidad tenía una significación universal y mecanicista muy distinta.


La visión de Voysey parece haber alcanzado su plena madurez en las grandes casas situadas en entornos rurales, como Perrycroft, proyectada para un emplazamiento en las colinas de Malvern (1893), o Greyfriars (1896), construida en un cerro de Surrey conocido como Hog's Back. La primera de ellas utilizaba extensamente los contrafuertes inclinados y los aleros muy salientes no solo como recursos estructurales, climáticos y compositivos , sino también como modos de ligar el edificio al terreno e indicar la continuidad con el diseño vernáculo local. Esta era una idea central en la doctrina arquitectónica de las Arts and Crafts: las costumbres y los materiales autóctonos debían traducirse en un buen use por parte del profesional moderno. Aunque Voysey personalmente no era un artesano, si prestaba atención al diseño de papeles pintados, muebles, accesorios y aditamentos, pues entendía que los mismos impulsos debían inspirar todos los interiores de una casa al igual que condicionaban la forma general. En esto perseguía de nuevo una sencillez retorica que estaba en abierto contraste con el recargamiento y la complejidad del diseño victoriano anterior. En The Orchard, Chorleywood (1899-1900), los muros y las barandillas de las escaleras se habian despojado de todo, y los pasadores y los goznes de las puertas se habían modelado siguiendo ejemplos rurales; los interiores estaban bañados por la luz. Pevsner solía asociar esta sinceridad y esta juventud con una reacción más amplia respecto a los valores. <>


Otro rasgo novedoso de los proyectos de Voysey era el modo en que los volúmenes interiores se abrían de modo que tendrían a fluir unos dentro de otros. En Broadleys (1898), una casa que domina el lago Windermere, el salón se modeló como un doble espacio. En planta, los elementos principales estaban sutilmente dispuestos con un orden que combinaba cierto grado de simetría y regularidad con cualidades irregulares y asimétricas. De esta manera, Voysey consiguió dar forma a las pautas de la vida social de los ingleses acomodados de finales de siglo. Se trataba de una especie de rusticicdad intencionada, una emulacion del 'habla cormún' del estilo verniculo, que era, desde luego, muy conscience.


---


FRAMPTON Kenneth., Historia crítica de la  Arquitectura Moderna. Gustavo Gili. Barcelona, 1987.  


Págs. 42-50.“Noticias de ninguna parte. Inglaterra, 1826-1924”.


 Estos ambiciosos fines sociales no preocupaban a Voysey, el individualista discípulo de Mackmurdo que en 1885 alcanzó una fuerza y una sencillez de estilo que iban a escapar a todos sus contemporáneos. Voysey creó su estilo a partir de los principios enunciados por Webb sobre el respeto hacia los métodos tradicionales y los materiales locales, más que de la inventiva y el virtuosismo espacial de Shaw. En un proyecto de casa no realizado de 1885, pensado para ser ocupado por él mismo, Voysey estableció (pese al entramado de madera al gusto de Shaw) los componentes esenciales de su estilo: una cubierta de pizarra con aleros muy salientes, canalones con ménsulas de hierro forjado, y muros con enfoscado rústico perforados por ventanas horizontales y marcados a intervalos por contrafuertes en talud y chimeneas. Estos rasgos iban a caracterizar su trabajo durante los treinta años siguientes. Estilísticamente, el estilo de Voysey era un intento directo de recuperar los valores básicos de la construcción rural inglesa. Sin embargo, su colaboración inicial con Mackmurdo introdujo en su obra un elemento fluido y sumamente sofisticado que se pondría de manifiesto en sus diseños de papeles pintados y trabajos en metal hacia 1890. Estos detalles proporcionaban ciertos acentos a los interiores, por lo demás austeros, de Voysey. Al contrario que Morris, Voysey estaba poseído por un sentido de la contención casi exagerado. Así, estipulaba que deberían tener dibujo las telas o los papeles pintados, pero nunca ambos. Su propia casa, The Orchard (construida en Chorley Wood, Hertfordshire, en 1899), ilustra la animada contención de su estilo en los interiores: balaustres de rejilla inundados de luz, rieles bajos para colgar cuadros, chimeneas rodeadas de baldosines, sencillos muebles de roble y alfombras gruesas. Si bien estos elementos se repitieron con pocas variaciones a lo largo de su carrera, sus diseños se fueron haciendo menos figurativos a medida que pasaban los años, y mientras que sus primeros muebles tendían hacia lo orgánico, los últimos se basaban en temas clásicos. 


Entre 1889 y 1910, Voysey diseñó unas cuarenta casas, algunas de las cuales transcendían el historicismo latente en su estilo. Entre ellas están la residencia de artista para J. W. Forster, construida en Bedford Park en 1890; la casa Sturgis, en Guildford, de 1896; y Broadleys, en el lago Windermere, su mejor casa, realizada en 1898. En ningún otro sitio igualó la claridad de esta planta, la generosidad de la distribución y de los jardines, y la audacia de la composición de masas y ventanas. Con todo esto, la influencia de Voysey fue tan amplia como su carrera, y entre los arquitectos que más la acusaron se cuentan el escocés C. R. Mackintosh, el inglés C. H. Townsend y los vieneses J. M. Olbrich y J. Hoffmann. 


Durante la primera fase de la carrera de Voysey, el movimiento inglés Arts and Crafts, defensor de las artes y los oficios, quedó firmemente institucionalizado: primero con la fundación, en 1884, de la Art Workers' Guild, la asociación de trabajadores del arte formada por instigación de Lethaby y otros miembros del estudio de Shaw


---


   PEVSNER N.,  Pioneros del diseño moderno. De William Morris a Walter Gropius. Infinito. Buenos Aires, 2000.


p. 17-40. "Teorías del arte desde Morris hasta Gropius"


....Puede decirse que el exuberante despliegue del movimiento inglés de la 'arquitectura libre —desde las excentricidades de A. H. Mackmurdo y C. R. Ashbee hasta la refinada profesionalidad de Shaw, Lethaby y C. F. A. Voysey— tuvo su origen en la creación de la Red House. Esta obra tuvo un efecto catalizador en el lanzamiento de Morris hacia su destino profesional; dos años más tarde el propio Morris organizó una asociación de artistas prerrafaelitas —incluyendo a Webb, Rossetti, Burne-Jones y Ford Madox Brown— para formar un taller que diseñara y realizara por encargo cualquier trabajo artístico, desde murales hasta vidrieras y muebles, desde bordados hasta trabajos en metal y madera tallada....


       Esta aprobación de la superficie sin adornos no era nueva en si misma. Habia sido ya dicho por Crane en 1889 que los «materiales y superficies simples son infinitamente preferibles al ornamento inorgánico o inapropiado»,y un año después que Sullivan, Charles F. Annesley Voysey escribía que seria bueno y deseable «desechar la masa de ornamentos inútiles.» Pero así como Voysey ha sido, a pesar de tales sugerencias, uno de los mas importantes representantes de la evolución ornamental en el período que va de Morris al siglo XX, Sullivan fue también tan revolucionario en su arte ornamental como en la utilización de superficie simples y lisas. En su mismo escrito de 1892 afirmo que «el ornamento orgánico» debía ser la etapa que siguiese a la purga de todo ornamento, la cual debía venir en primer término.


---


PEEL Lucy, POWELL Polly, GARRET Alexander., “La tradición británica” en Introducción a la Arquitectura del siglo XX. CEAC. Barcelona, 1990. Págs.25-31.


Si Lethaby era de escaso rendimiento, Charles Annesley Voysey (1857-1941) era prolífico. Diseñó unas cuarenta casas entre 1889 y 1910, abriéndose así un lugar como el más consumado exponente de arquitectura doméstica en los últimos decenios del siglo. Voysey se unió al Arts Workers Guild unos años después de su fundación, pero mantuvo una filosofía marcadamente puritana.  Construyó casas con una sencillez austera que acababa convirtiéndose en su fuerza. Las casas de Voysey se adherían claramente a un estilo básico que comprendía tejados de pizarra que sobresalían, muros enlucidos con revoque, ventanas horizontales con maineles no moldurados y cañones de chimenea enormes y afilados. Dichas experimentos estaban organizados en un arreglo bajo y continuo con reminiscencias de las casas de estilo Prairie de Frank Lloyd Wright, pero experimentaban poco la utilización del espacio interior. Voysey era famoso en el diseño de sus casas por tener en cuenta algún detalle del emplazamiento, como la luz del sol la vista o el paisaje.


La demanda de las casas de campo confortables de medidas modestas venía alimentada entonces por la creación de una nueva clase media y tenía mucho que ver con la riqueza generada cuando la gente cobró sus bonos del Estado después del acontecimiento de la guerra de los Boers (1899-1902). Voysey fue el arquitecto que más éxito tuvo de todo un grupo que hizo frente a ese pedido.


---


 


 

Subir