Págs. 317-331.“Regionalismo crítico: arquitectura moderna e identidad cultural”
“Nada más lejos de las intenciones de Bofill que la arquitectura del maestro portugués Álvaro Siza , cuya carrera —que comenzó con la piscina de la Quinta da Conceiçao , Matosinhos (1958- 1965)—, ha sido cualquier cosa menos fotogénica. Esto puede deducirse no sólo de la naturaleza fragmentaria y evasiva de las imágene spublicadas, sino también de un texto escrito en 1979: “La mayoría de mis obras no se publicaron nunca; algunas de las cosas que hice solo se llevaron a cabo en parte, otras se modificaron profundamente o se destruyeron. Era de esperar. Una formulación arquitectónica cuyo propósito es calar hondo [...] una formulación que pretende ser algo más que una materialización pasiva, se resiste a reducir esa misma realidad y analiza todos sus aspectos , uno por uno; esa formulación no puede encontrar apoyo en una imagen fija, no puede seguir una evolución lineal. [...] Cada diseño debe captar, con el máximo rigor, un momento preciso de la imagen palpitante, con todos sus matices, y cuanto mejor se reconozca la cualidad palpitante de la realidad, más claro será el diseño.[...]”. Puede que ésa sea la razón por la que tan sólo las obras marginales (una vivienda tranquila, una casa de vacaciones a muchos kilómetros de distancia) se han conservado tal como se diseñaron vez engendrados por otros, que dejan huellas en el espacio y en la gente, que se funden en un proceso de transformación total.
Esta hipersensibilidad a la transformación de una realidad fluida y sin embargo específica hace que la obra de Siza sea más estratificada y arraigada que las tendencias eclécticas de la Escuela de Barcelona , ya que, al tomar a Aalto como punto de partida, Siza ha basado sus edificios en laconfiguración de una topografía específica y en la textura menuda del tejido local.En este sentido, sus obras son respuestas estrictas al paisaje urbano , campestre y marítimo de la región de Oporto.
Otros factores importantes son su respeto por los materiales del lugar, por la artesanía y por las sutilezas de la luz local ; un respeto que se sostiene sin caer en el sentimentalismo de excluir las formas racionales y las técnicas modernas. Al igual que el ayuntamiento de Säynätsalo , de Aalto, todos los edificios de Siza están delicadamente situados en la topografía de sus emplazamientos. Su planteamiento es marcadamente táctil y tectónico más que visual gráfico: desde la casa Beirés , en Póvoa do Varzim, de 1973-1976 hasta las viviendas para la asociación de vecinos de Bouça , en Oporto, de 1973-1977. Incluso sus pequeños edificios urbanos —de los que el mejor es probablemente la sucursal del banco Pinto e Sotto Mayor construida en Oliveira de Aceméis en 1974— están estructurados de manera topográfica.
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págs.25-58“. Espacio y antiespacio. Lugar y no lugar en la arquitectura moderna”.
"En las obras de arquitectos de la llamada "tercera generación" renace el interés por la arquitectura vernácula al unísono de esta sensibilidad por el lugar...
...Fernando Távora(1923) desarrolla en su obra el saber constructivo de la arquitectura tradicional portuguesa, planteando una arquitectura moderna sabiamente adaptada al paisaje y exultantemente cualificada por objetos artesanales. Prueba de ello son el parque municipal de Quinta da Conceiçao, en Matosinhos (1957) o la casa de veraneo en Ofir(1957-1958). Esta nueva sensibilidad es el resultado del estudio sobre la Arquitectura popular en Portugal, que se publica en tres volúmenes en 1961, y en el que Távora interviene con un espíritu racionalista y contemporáneo que quiere aprehender la funcionalidad, la belleza y el saber técnico de la arquitectura popular, lejos de cualquier nostalgia, anacronismo o populismo. Y ello tiene continuidad en la límpida obra de Alvaro Siza Vieira, tanto en sus realizaciones tempranas -el restaurante Boa Nova(1958-1964) y las piscinas(1961-1966), ambos en Leça de Palmeira-como en obras recientes tales como la nueva Facultad de Arquitectura en Oporto (1987- 1994)...
...En todos estos casos se produce una resonancia respecto a las concepciones de Martin Heidegger, pasándose de una arquitectura basada en la idea de espacio a una basada en la idea de lugar. Según el texto crucial de Heidegger, Construir, habitar, pensar(1951), "los espacios reciben su esencia no del espacio sino del lugar /... los espacios donde se desarrolla la vida han de ser lugares". De nuevo aflora la influencia del pensamiento griego y la referencia al templo dórico. Y sin duda el pensamiento de Heidegger, junto con las aportaciones de Husserl y Merleau-Ponty, han sido el más certero catalizador de toda reflexión contemporánea sobre el concepto de lugar.
Christian Norberg-Schulz, seguidor de estas concepciones, se opone a toda teoría de la movilidad, de los espacios transitorios, y defiende que "si se elimina el lugar se elimina al mismo tiempo la arquitectura.. El espacio existencial consiste siempre en lugares". Norberg Schulz ha intentado con el concepto de espacio existencial salvar la tradición moderna del concepto de espacio moderno de su maestro Sigfried Giediony conciliarla con la nueva idea de lugar." Sin embargo, ello le lleva a negar las experiencias más contemporáneas e innovadoras."
págs.115-140. “Tipo y estructura. Eclosión y crisis del concepto de tipología arquitectónica” en
"Posiblemente, este artificio historiográfico utilizado por la crítica y la teoría arquitectónica del movimiento moderno, desde Edoardo Persico a Giedion, desde el Esprit Nouveau de Le Corbusier hasta AC. Documentos de Actividad Contemporánea del GATEPAC, haya perdido validez. Las crisis que se han evidenciado en las últimas décadas, con el hundimiento de los modelos ideales de sociedad y con el reconocimiento del pluralismo, el relativismo y un multiculturalismo abierto, se ha ido diluyendo el potencial instrumental del concepto de tipo-ideal y su validez universal.
Ciertamente, se constata que las interpretaciones de los coleccionistas de tipos -desde J.N.L. Durand hasta Nikolaus Pevsner- con su esfuerzo para ordenar un número infinito de ejemplos dentro de catálogos y repertorios, son inoperantes en la actualidad. El predominio de la forma sobre la función, los cambios de uso al reutilizar edificios antiguos o el campo abierto por experimentos en que las tipologías convencionales se diluyen, han transformado totalmente el orden tipológico. Fijémonos en que los autores más destacados de las diversas metodologías predominantes no han tendido a realizar obras modélicas, sino que han trazado un itinerario. Desde Aldo Rossi, Robert Venturi, James Stirling, Hans Hollein hasta álvaro Siza, Rem Koolhaas o Jean Nouvel, sus obras son piezas que aceptan su condición fragmentaria dentro de un cierto método y de una cierta trayectoria, y no han pretendido, ni conseguido, convenirse en hitos indiscutibles, en tipos ideales."