El Expresionismo como movimiento artístico y cultural que se empezó a desarrollar en Alemania en los momentos anteriores a la I Guerra Mundial, intenta de alguna manera frenar el sometimiento a la cultura industrial, a través de la expresión arquitectónica. En el caso alemán el uso del cristal desea crear espacios completamente libres de muros y abiertos a la luz y a la vida. Los grupos sociales y artísticos que defienden su uso, se dan a conocen a través del movimiento conocido como la “Cadena de Cristal”. El Pabellón de cristal de Bruno Taut para la exposición de la Werkbund de 1914 en Colonia, es el punto de partida de un relato que se detiene en las obras más destacadas de Hans Poelzig, Eric Mendelsohn, Hugh Häring y en el uso que del cristal realiza Mies van der Rohe en su propuesta para rascacielos en la Friedrichstrasse de Berlin