Imprimir

Villa Müller

  • 1928 - 1930
  •  
  • LOOS, Adolf
  • SCHNEIDER, Camilo
  • LHOTA, Karel
  • KARL HERMANN, Furster
  • LOTHA, Karel
  •  
  • Praga
  • República Checa
imagenes/3845_1_33010180.jpg obras/6753_8_33010180.jpg obras/6753_26_33010180.jpg obras/6753_27_33010181.jpg imagenes/3846_1_33010181.jpg imagenes/3848_1_33010183.jpg obras/6753_29_33010183.jpg imagenes/3854_1.jpg obras/6753_46.jpg imagenes/3850_1_33010185.jpg imagenes/3867_1_33010117.jpg obras/6753_25_33010117.jpg imagenes/3847_1_33010182.jpg obras/6753_28_33010182.jpg obras/6753_31_33010185.jpg obras/6753_32_33010186.jpg imagenes/3851_1_33010186.jpg imagenes/3849_1_33010184.jpg obras/6753_30_33010184.jpg obras/6753_33_33010187.jpg imagenes/3852_1_33010187.jpg imagenes/3853_1_33010188.jpg obras/6753_34_33010188.jpg

COLQUHOUN Alan.,  La arquitectura moderna. Una historia desapasionada. Gustavo Gili.Barcelona. 2005. 


Págs. 73-85.“La urna y el original: Adolf Loos, 1900-1930”  


Este Raumplan (que es como lo llamaba Loos ) transformaba la experiencia de la casa en un laberinto espacio temporal , haciendo difícil la formación de una imagen mental del conjunto. El modo en el que los ocupantes se movían de una espacio a otro estaba sumamente controlado (aunque veces había recorridos alternativos), pero no se establece un sistema de expectativas a priori , como ocurriría en una planta clásica. En las últimas casas, la Moller y la Müller , se añadió al conjunto de las salas de recepción un íntimo tocador femenino situado en el punto más alto de la secuencia, de modo que funcionaba al mismo tiempo como puesto de mando y sancta sanctorum. Con frecuencia, a través de la secuencia de salas se abrían vistas diagonales [figura 49].


En la ordenación espacial de estas casas, los muros desempeñan un papel esencial. Tanto desde el punto de vista fenoménico como estructural. La diversidad de los niveles del suelo exige que los muros (o al menos sus trazas geométricas, pues a veces se reemplazaban por vigas apoyadas en pilares) atraviesen verticalmente todas las plantas. La continuidad espacial entre las habitaciones se creaba no solo eliminando muros, sino perforándolos con amplios vanos de modo que las vistas siempre quedasen enmarcadas y se mantuviese la sensación de recinto espacial en la sala. A menudo, la conexión entre las habitaciones era únicamente visual, como a través de un proscenio. En cuanto a su interrelación, estos espacios tenían una cualidad teatral . Beatriz Colomina ha señalado con agudeza que en un interior de Loos siempre parece que alguien está a punto de hacer su entrada. Los muros exteriores desempeñaban un papel distinto aunque igualmente importante; estaban perforados por huecos relativamente pequeños que no permitían un contacto visual sostenido con el mundo exterior. Las casas de Loos eran cubos herméticos , difíciles de penetrar.


---

Subir