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POTTER, William Appelton

  • Arquitecto
  •  
  • 1842 - Schenectady (New York). Estados Unidos
  • 1909 Estados Unidos

KOSTOF, Spiro., Historia de la arquitectura. Alianza Editorial. Madrid 1988. Tomo 3


págs.1107-1165.“Ambientes Victorianos” 


pág.1128. La América victoriana.


El esplendor público también se extendió a los cuarteles generales de la enormemente desarrollada burocracia federal a nivel estatal. Las casas de aduanas, los tribunales y las oficinas de correos, así como los hospitales militares cuya ausencia fue lamentada amargamente durante la guerra, con instalaciones para veteranos y sus familiares, se distribuyeron como donaciones federales. Eran costosas estructuras de escala mucho mayor que las ciudades apenas nacientes, y estaban concebidas para estimular el orgullo local y celebrar la devoción a la Unión. Muchos fueron a las ciudades del Oeste que comenzaba a despertar. Durante su construcción salían a la luz casi anualmente escándalos de corrupción y despilfarro.


Era ésta una arquitectura de enmarques y repeticiones obsesivas. Las unidades individuales no eran en si mismas muy diferentes de las del revival renacentista, pero ahora el plano del muro estaba ocultado por la multiplicación implacable de las crujías y por la rígida y reiterativa colección de columnas, dinteles y cornisas que calzaban a los vanos y producían el efecto de un laborioso apilamiento. La aspiración del edificio era ser un «masivos». Si el resultado final es visto como «neo-barrocos», ello se debe a la inflación de medios renacentistas. Lo que falta es la llamarada cinética del auténtico barroco que da energía a la masa y arrastra a las unidades a un conjunto modulado. Un montón de pequeñeces rotos, llamaba a la oficina de correos de Nueva York, de Mullett, un arquitecto de la generación anterior, y no es difícil comprender lo que quería decir.


Pero estos montones ricos y abundantes que ocupaban espacio y sobrecargaban el ojo satisfacían a las pasiones imperiales de lo que en otro tiempo era una república arcádica: esto, junto con el gusto por la variedad y la complicación por sí mismas. El medievalismo policromo del alto gótico victoriano, alimentado por la influencia de los escritos de Ruskin, respondía a estos mismos intereses. Era el estilo de la Academia y de la Iglesia. En manos de W. A. Potter (1842-1909), que sucedió a Mullett como Arquitecto Supervisor, el gótico ruskiniano también afecto a los programas constructivos federales durante algún tiempo.


Era una época de un eclecticismo exhuberante y de un laissez-fairearquitectónico lleno de energía y sin ley. Despreocupados incluso de la pretensión del rigor arqueológico, los edificios se componían como si debieran demostrar que todas las culturas humanas eran canteras adecuadas para su nación triunfante

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