Construida entre 1568 y 1584, El Gesù fue la primera iglesia jesuita que se construyo en Roma y en la actualidad constituye uno de los ejemplos mas destacados del arte barroco romano. Aunque en un principio resulto algo austera, la iglesia pronto comenzó a ser invadida por una decoración barroca, con impresionantes frescos ilusionistas que deslumbran al visitante. Así, el el rasgo mas llamativo de la decoración interior es el fresco del techo, de Giovanni Battista Gaulli, quien también pinto al fresco la cúpula.
En cuanto la planta la iglesia esta organizada de tal modo que se logra que la congregación quede reunida frente al altar mayor.
Aunque El Gesù no es una de las iglesias mas llamativas de Roma, se trata de una iglesia que ha marcado un hito en la arquitectura, que con pocas modificaciones se ha convertido en modelo para los templos jesuitas y de otras ordenes de la Contrareforma, tanto en Europa como en la América Hispánica.
Marisel CARABALLO