CRIPPA, María Antonietta., Antoni Gaudí 1852-1926. De la naturaleza a la arquitectura. Edit. Taschen. Colonia, 2007

p.35. "En 1886, Joan Baptista Grau i Velles Pinós, sacerdote nacido en Reus, razón por la que conocía a Gaudí, fue nombrado obispo de Astorga en León. Gaudí ya era un arquitecto renombrado y controvertido, conocido en toda España, cuando el obispo decidió realizar el Palacio Episcopal. 

En el momento del encargo, Gaudí se hallaba muy absorbido en los proyecto del Palacio Güell y de la Sagrada Familia, por lo que pidió documentación fotográfica del lugar elegido por el obispo y sólo viajó a Astorga cuando las obras se habían iniciado. 

Rápidamente surgieron problemas con la Academia de Bellas Artes de San Fernando, un órgano de control de los edificios públicos y de carácter artístico. Los académicos se mostraron contrarios a muchas soluciones neogóticas gaudianas y, quizá por ello tras la muerte repentina del obispo de Grau en 1893, Gaudí abandonó el proyecto. 

El palacio tiene aires neogóticos, pue Gaudí lo concibió como un castillo y lo construyó con fuertes bloques de granito, rodeado de un foso. La planta central es cuadrada y está flanqueada por cuatro torres cilíndricas, una por esquina. Del cubo central sobresalen otros volúmenes más pequeños en las cuatro fachadas. Todas las salas interiores se articulan alrededor de una gran sala central de doble altura, iluminada con claraboyas y un almenado de etilo mudéjar realizado en relieve sobre el revoque del techo piramidal. La parte más compleja es el ábside de la capilla interior, coronada con tres ábsides menores. Lo más impresionante es el pórtico, por sus tres elevados arcos abocinados compuestos de sillares de grandes dimensiones, separados entre sí por contrafuertes inclinados. Gaudí había previsto coronar la fachada principal con un ángel de cinc de 5 m. de altura. 

Los espacios interiores y los decorados de inspiración gaudiana interpretan libremente motivos góticos esgrafiados en las paredes. Las bóvedas tabicadas son de ladrillo, con nervios de cerámica vidriada de color rojo oscuro. Los capiteles presentan formas extrañas, a veces con motivos vegetales y otras inspiradas en juegos de volúmenes. Se conservan muchos de los vitrales originales. 

El edificio, concebido como residencia y como lugar de representación del obispado, nunca fue utilizado para estos fines, y acabó convertido en museo. Además, fue completado por el arquitecto Ricardo García Garreta entre 1907 y 1914, con modificaciones radicales, sobre todo en la parte alta. Desgraciadamente la unidad conceptual original se ha visto alterada por la fragmentación de las salas y al ampliación del volumen global del palacio."