VV.AA., Fernando Chueca Goitia. Un arquitecto en la cultura española. Fundación Antonio Camuñas. Madrid, 1992.
págs. 208-213. "Este Cigarral, situado en uno de los más bellos parajes en torno a Toledo y con vistas sobre la ciudad, fue construido hacia los años 1960 en un estilo típico de la región, pero dentro de su ambiente se buscó, por deseo expreso de sus propietarios, que tuviera un gran equilibrio y serenidad clásicos, es decir, dentro de lo toledano que mirara más hacia el renacimiento, muy presente también en la ciudad, que el mudéjar o a otros estilos medievales. Por eso la planta es muy simétrica y está organizada bajo el predominio de unos ejes de simietría muy dominantes. La edificación tiene un bloque rectangular de doble altura y unas alas formando una U y abrazando una especie de atrio abierto orientado hacia poniente. Con este atrio cerrado por una verja e compone la fachada de poniente o fachada de ingreso a la residencia. La fachada contraria o fachada sensiblemente saliente, es la que mira a Toledo. El cuerpo principal está flanqueado por dos pabellones organizados como porches para la estancia al aire libre.
Los materiales utilizados son la piedra granítica en zócalos, molduras, cornisas y portadas principales, el aparejo mixto de ladrillo y mampostería típicamente toledanos y por supuesto la tela curva o árabe que para su mejor entonación es teja antigua."