Inprimatu
Larkin Building

Larkin Building

  • 1903 - 1904
  •  
  • WRIGHT, Frank Lloyd
  •  
  • Buffalo (Nueva York)
  • Estados Unidos
imagenes/10287_1_36010143.jpg imagenes/3553_1.jpg imagenes/3554_1.jpg imagenes/3552_1.jpg imagenes/10286_1_36010142.jpg obras/7913_8.jpg imagenes/8501_1_36010174.jpg

CURTIS William. J.  La arquitectura moderna desde 1900. Edit. Phaidon. Hong Kong, 2006. 


Págs. 113 – 129.“El sistema arquitectónico de Frank Lloyd Wright"


Aunque la mayoría de las obras de Wright hasta 1910 fueron casas, también recibió otros tipos de encargos. Así pues, su ‘sistema’ hubo de extenderse para dar cabida a nuevas demandas funcionales y expresivas. En 1902, por ejemplo, la compañía de venta por correo Larkin, de Buffalo (Nueva York), le pidió que proyectase un edificio de oficinas en función de sus necesidades. El solar estaba casi completamente rodeado por vías férreas, con fábricas al fondo y unos depósitos de gas más cerca. Parecía aconsejable una solución volcada hacia el interior y sellada herméticamente. Del vocabulario de la ‘casa de la pradera’ Wright adoptó el tema de las plataformas colgadas de pilares verticales, que dispuso alrededor de un espacio a modo de atrio, alto e iluminado cenitalmente. Las escaleras y las instalaciones de ventilación se colocaron en torres altas situadas en las esquinas, de las cuales estaba colgado el sistema interior. Esto daba un carácter macizo y monumental al exterior y proporcionaba un énfasis vertical suficiente para unificar las partes más pequeñas y hacer coherente la forma global. Con su silueta severa y dominante, su fuerte carácter axial y su amplio espacio interior a modo de nave, tal vez sea comprensible que al edificio Larkin se le describiese como ‘una catedral del trabajo’ (tenía inscripciones con lemas moralistas que indicaban valor religioso de éste), pero el edificio también evocaba los diseños de Wright para aparadores u otros muebles domésticos. Grandes o pequeños, todos los diseños se trataban de acuerdo con unos principios formales coherentes.


Asimismo, el edificio Larkin revelaba la postura de Wright en relación con sus coetáneos y sus predecesores. En realidad, se trataba de una versión más vertical de un tipo urbano ya existente: el edificio de oficinas con un atrio acristalado e iluminado cenitalmente en el centro. Desde el punto de vista gramatical, era un descendiente del edificio Wainwright de Sullivan, pero invertido, por decirlo así, de fuera adentro. La volumetría evocaba una versión abstracta del pilonos egipcios, mientras que las líneas generales revelaban quizá la influencia de la sede de la Secession vienesa (1897-1898), de Olbrich. La austeridad y la audacia eran típicas de los tipos industriales como los silos de grano, y sin embargo el conjunto tenía una atrevida monumentalidad. El edificio Larkin recibió encendidos elogios de los proyectistas europeos que andaban en busca de una arquitectura moderna, pero fue censurado por varios prestigiosos críticos norteamericanos (por ejemplo, Russell Sturgis), por estar demasiado desnudo. Wright defendió su planteamiento en estos términos:


Hay cierto placer estético en dejar tal cual una cosa que durante siglos ha sido torturada y distorsionada y con la que se ha regateado en nombre del Arte, y así dejar que su dignidad innata se ponga de manifiesto una vez más. Confieso mi amor por las aristas limpias; el cubo lo encuentro reconfortante; la esfera, inspiradora. En la oposición del círculo y el cuadrado encuentro motivos para temas arquitectónicos [...];combinando éstos con el octógono, encuentro materiales suficientes para un desarrollo sinfónico. Puedo maridar estas formas de varios modos sin adulterarlas, pero me encantan puras,fuertes e inmaculadas [...]. Hay suficiente sitio, dentro de estas limitaciones, para que un artista trabaje -estoy seguro- y responda bien al instinto para los principios básicos.


---


FUSCO Renato de ., “La arquitectura orgánica“ en Historia de la arquitectura Contemporánea. Ed. Celeste. Madrid,1992. 


Pág. 355-358...Estas fueron algunas de las relaciones de los primeros edificios de Wright con el Art Nouveau (otras tienen que ver con la obra plástica menor -recordemos las vidrieras de las casas Willitts, Coonley, Robie, etc.-) y pueden encontrarse otras con el protorracionalismo. El Larkin Building de Buffalo de 1904 y el Templo Unitario de Oak Park de 1906 -edificios simétricos, de rígida estereometría el primero, como exige una construcción para el trabajo, con la máxima articulación el segundo, como exige una iglesia pertenecen sin duda al código. El estilo de Hoffmann, Behrens, Perret, Loos, etc... Pero este contacto con el protorracionalismo adquiere también con Wright un acento especial. Hemos visto el final de esta tendencia al atascarse en las formas clasicistas, al agotarse su vena inventiva precisamente en lo que se refiere a los elementos de la figuración, hasta el punto de que, como ya se ha observado, el paso del protorracionalismo al racionalismo se debe en buena parte a la contribución de la vanguardia figurativa.  Por el contrario, el protorracionalismo, por así decirlo, wrightiano, encuentra en sus propios términos arquitectónicos y linguísticos la capacidad para liberarse del clasicismo, y además tanta riqueza de nuevos elementos figurativos que se anticipa en algunas corrientes de la pintura y de la escultura europeas. En efecto, mientras que en el Larkin predomina la invención tipológica, el gigantismo de la <> central, las aplicaciones técnicas de las instalaciones que posibilitan el funcionamiento de un edificio que encuentra todo resuelto en su interior y, por el contrario, en los Midway Gardens de Chicago, construidos posteriormente, en 1914, predominan los acentos decorativos, figurativos y plástico-pictóricos en un conjunto que no era exactamente un modelo de buen gusto...


... En los fecundos años treinta pueden reconocerse tres familias morfológicas en las obras del maestro americano, las representadas por el rectángulo, por el triángulo y por el círculo, que, no obstante su inédita articulación, recuerdan en diversas formas el cubismo, el purismo, el neoplasticismo y el arte abstracto...


Al mismo periodo pertenece el conjunto de las oficinas Johnson en Racine, Wisconsin, que marca un nuevo giro en el estilo de Wright: la adopción de una morfología de elementos curvilíneos y la alusión a una dimensión, por así decirlo, utópica. Las oficinas de la Johnson se relacionan con el edificio Larkin, construido treinta años antes. En cuanto a la relación con el entorno, ambas obras son compactas y cerradas en sí mismas, pero mientras que en el Larkin este carácter proviene del bloque paralelepipédico, con sus durísimas esquinas de ladrillo, en el Johnson se realiza mediante la convergencia hacia el interior de las superficies curvilíneas de los cerramientos. Respecto al interior, mientras que en el edificio de Buffalo hay un espacio central estrecho que llega hasta la cubierta, rodeado por galerías, en un sistema inmóvil y severo de pilares y balaustradas macizas, Wright realiza en el de Racine uno de los espacios más libres e imprevistos de toda la arquitectura contemporánea, desde la estructura elástica antisismica al empleo de las características columnas en forma de hongo, desde el gran techo luminoso a las bandas continuas de las paredes perimetrales de elementos transparentes perforados por tubos de pirex. Este edificio es el inicio, o por lo menos constituye el mejor ejemplo, de las obras desarrolladas sobre la morfología curvilínea ya citada, que representa otra de las contribuciones de Wright a la arquitectura orgánica

Igo