LATHI Louna., Alvar Aalto 1898-1976. Paraíso para gente modesta. Edit. Taschen. Colonia, 2006.
p.17. "Durante sus diferentes fases creativas. Alvar Aalto alude en reiteradas ocasiones al efecto inspirador producido por el paisaje y la arquitectura de los países mediterráneos, especialmente los de Italia. Venecia con sus palacios y canales, la capilla Pazzi de Florencia y la architettura minore medieval (la arquitectura anónima de la pequeña ciudad), estaban estrechamente relacionadas con él. De su ciudad natal (Jyväskyla) quiso hacer una ciudad mediterránea sobre una colina, una Florencia del norte.
El club obrero fue el primer edificio público realizado por Aalto en Jyväskyl. Su proyeccción se inició principios de 1924 y las obras concluyeron al año siguiente. En el club obrero se pueden descubrir rasgos de la antigua arquitectura del sur aplicados al estilo clasicista dominante durante los años veinte.La construcción de un edificio público en un terreno que hacía esquina fue un motivoo de preocupación para Aalto. Los edificios importantes se suelen ubicar en parques o lugares similares de manera que éstos cuentan con una fachada principal inequívoca. Por esta razón. el Club Obrero supuso un reto para el arquitecto. El proyecto encargado por la asociación obrera preveía una cafetería y un restaurante para la planta baja, y sobre ésta, un teatro elevado en la primera planta. La fachada principal con influencias venecianas queda dominada por el balcón de ceremonias que cuenta con una ventana dividida a modo de cuadrícula. El balcón no responde a ninguna función práctica, sino que se limita a formar parte de la composición asimétrica de la fachada, al igual que el resto de los elementos decorativos. La segunda fachada que da a la calle es totalmente simétrica. En la plaanta baja, ambas fachadas cuentan con ventanas flanquedas por columnas dóricas. La tercer parte, más corta, cerraba el patio de ceremonias ubicado en el amplio terreno. El resultado es un palacio "alle colonne" a la medida de una pequeña ciudad del centro de Finlandia.
La idea en la que se basa el Club Obrero sigue el modelo clásico del teatro decimonónico; la entrada y zona de servicios se encuentra en la planta baja, desde donde se llega al vestíbulo y al verdadero teatro a través de una escalera. La escalera queda dominada por los detalles clásicos y por una ventana circular simétrica. El elemento arquitectónico central del vestíbulo lo conforma la pared curvada que atraviesa el edificio de arriba a abajo, en cuyo centro se encuentra la entrada principal a la sala del teatro. Esta pared curvada y sus pinturas decorativas se han tomado prestadas casi directamente del arquitecto renacentista Leon Battista Alberti, muy admirado por Aalto. Para los cuerpos de luz y otros detalles, Aalto se apoyó en las formas tradicionales.
Puede resultar cuestionable si una expresión de formas cláscicas y distinguidas resulta apropiada para el espíritu democrático de una asociación obrera. Sinembargo, Aalto consigue ofrecer una hábil respuesta a dicha cuestión: el arquitecto rompe la dura simetría en vadios puntos y resalta la dimensión humana. El Club Obrero fue el primer centro cultural y el primer edificio multiuso del arquitecto en el que ya se aprecian, en estado embrionario, los elementos centrales de sus diseños posteriores".