El presente capítulo, a través de la selección de significativos textos de diversos autores del momento, como Dickens, Engels, Ruskin, Haussman… intenta explicar la problemática, social, urbana y administrativa de la creciente ciudad industrial llevada a cabo durante el siglo XIX.
La repetición seriada de los elementos de la nueva arquitectura a escala urbana, la expansión y confusión tipológica, junto con la pérdida de identidad y del espíritu del lugar, por ese vertiginoso crecimiento y transformación, son algunos de los problemas que se plantean.
La visión de los escritores resaltando esa nueva e inquietante realidad, contrasta con el poder operativo que se lleva a cabo por parte de los ingenieros y reformadores sociales, siendo este momento en el que nace la disciplina urbanística, especialmente inestable y conflictivo, en una creciente sociedad urbana que marcará para el futuro, modelos de actuación a nivel global. Paris y Londres aparecen como ejemplos analizados de esta transformación.
La pintura nos muestra este cambio que se produce desde el realismo social en muchas ocasiones escapista, hasta el impresionismo, que reduce las formas a motivos cromáticos. Pero si la pintura puede limitarse a reflejar el mundo, la arquitectura debe proponerse el transformarlo. Confirmándose dicha transformación en épocas venideras, que tendrá como punto de partida, la situación que se refleja en este preciso momento.