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NIEMEYER, Oscar

  • Arquitecto
  •  
  • 1907 - Río de Janeiro. Brasil
  • 2012 - Río de Janeiro. Brasil
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CURTIS William. J. La arquitectura moderna desde 1900. Edit. Phaidon. Hong Kong, 2006. 


Págs. 395 – 415 “La arquitectura moderna en los Estados Unidos; inmigración y consolidación”


Algunos de los dramas de la transmigración ya se habían escenificado en la década de los 30, cuando los arquitectos tan diversos como Aalto, Niemeyer, Sakakura, Barragán y Sertestaban ocupados en encontrar formas en sintonía con los climas locales y sus modos de vida. La obra de las figuras trascendentales de los años 30 también reflejaba una nueva sensibilidad con respecto a la naturaleza y el lugar como Wright y Le Corbusier.


  ...Otra de las características del amplio panorama posterior a la guerra fue “la victoria” internacional de la arquitectura moderna. De Rio de Janeiro a Sydney, de Tokio a Beirut. Difusión de imágenes estereotipadas exportadas por USA, y de la necesidad de las elites autóctonas de romper con las anteriores tradiciones coloniales del XIX, o bien con las tendencias nacionales o regionales existentes, que encontraban demasiado restrictivas.


En USA, la mayor parte de Europa Occidental, Japón, México y Brasil había inicios anteriores a la guerra. En otros lugares como India y Australia, la arquitectura moderna tuvo que partir prácticamente de cero.....


Juzgar y evaluar cómo este cuerpo extraño fue acogido o rechazado, o bien se acomodó al tejido cultural preexistente. En los  años 30 arquitectos como Aalto, Niemeyer, Sakakura, Barragán, Sert estaban ocupados en encontrar formas en sintonía con los climas locales y sus modos de vida.


..... Algunos de los dramas de la transmigración ya se habían escenificado en la década de los 30, cuando los arquitectos tan diversos como Aalto, Niemeyer, Sakakura, Barragán y Sertestaban ocupados en encontrar formas en sintonía con los climas locales y sus modos de vida. La obra de las figuras trascendentales de los años 30 también reflejaba una nueva sensibilidad con respecto a la naturaleza y el lugar como Wright y Le Corbusier.


págs. 635-655.... "Universal y local. Paisaje, clima, cultura"


La reevaluación crítica de la arquitectura moderna avanzó a ritmo acelerado en los años de posguerra, a veces en un intento de encontrar el adecuado equilibrio entre los ideales progresistas de la modernización y la industrialización, los mitos nacionales y las fuerzas. naturales de unas regiones concretas. Después de todo, éste fue el periodo de los espléndidos logros individuales de arquitectos como el mexicano Luis Barragán, el japonés Kenzo Tange, el brasileño Oscar Niemeyer o el turco Sedad Hakki Eldem, que trabajaban en Medio de la tensión existente entre la influencia internacional y la interpretación de su sociedad en particular. El término 'regionalismo' se ha usado a veces para describir estas tendencias, pero no las explica adecuadamente a que puede implicar algo provinciano o periférico. Tanto los objetivos como los logros de dichos arquitectos trascendían sus situaciones locales. En todo caso, lo que querían era combinar diferentes `universalismos': Los que percibían en las obras fundamentales de los arquitectos modernos, y los que percibían en las subestructuras de sus culturas respectivas, algunas de las cuales (por ejemplo, México, Turquía o Japón) descansaban sobre los cimientos de antiguas civilizaciones y grandes tradiciones. A su vez, estos arquitectos aportaron nuevas ideas fundamentales al mundo más amplio de la arquitectura.


En la década de 1970, tanto el mapa político como el universo arquitectónico habían cambiado, lo que se plasmó en la concesión de un estatus y una validez mayores a las tradiciones no occidentales, así como en una actitud mucho más permisiva con respecto al uso del pasado....


 


CURTIS W.,  La arquitectura moderna desde 1900.Phaidon. Hong Kong, 2006. 


Págs.. 491-511.“Proceso de asimilación. Ame. Latina, Australia, Japón”. 


En Brasil, los cimientos de un movimiento moderno nacional se pusieron en la década de 1930, cuando arquitectos como Lúcio Costa y Oscar Niemeyer(tomando a Le Corbusier como uno de sus puntos de partida) centraron el espíritu progresista del estado brasileño en torno al importante proyecto del Ministerio de Educación en Río de Janeiro (página 386). La arquitectura moderna supuso una clara ruptura con el eclecticismo anterior pero también abrió el camino a una mitología autóctona basada en una reacción metafórica al paisaje mismo. Las obras de Niemeyer a principios de los años 1940 (como las de Pampulha) en lo que tal vez tuvieron más éxito fue en establecer los términos de un lenguaje moderno brasileño, recurriendo para ello a una interpretación práctica y lírica de las condiciones tropicales en unos edificios de carácter esquelético o transparente, animados por complejas curvaturas en la planta y la circulación. Pero el propio Niemeyer era perfectamente consciente del limitado papel social desempeñado por su arquitectura en este periodo inicial, y más tarde afirmaría que le habría gustado hacer «una aportación más realista» que reflejase «no sólo los refinamientos y la comodidad, sino también una colaboración positiva de la sociedad». Un dilema de esta índole afectaría a este arquitecto y al conjunto los arquitectos que trabajaban en países 'en desarrollo' su arquitectura, para llegar a construirse, tenía que convertirse con frecuencia en el elegante juguete de una minoría rica y exigua...


...Las cubiertas curvas y flotantes y las interpretaciones dinámicas de Niemeyer señalaban un polo de la arquitectura latinoamericana de posguerra; los muros compactos y los patios laberínticos de Barragán, otro. Si el primero estableció alguno de los términos de una expresión moderna tropical para condiciones cálidas y húmedas, el segundo hizo algo análogo para las cálidas y secas. La interpretación del clima no era un ejercicio simplemente práctico y geográfico, sino también cultural y poético, y algunos de los resultados más ricos se conseguían cuando la anatomía espacial completa de un proyecto estaba a tono con el modo de vida.


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CURTIS, W.,La arquitectura moderna desde 1900. Edit. Phaidon. Hong Kong, 2006.


págs.685-689."Conclusión: modernidad, tradición y autenticidad"


sta feliz coincidencia de circunstancias históricas e intenciones estéticas duró poco, pero no obstante cambió muchos de los fundamentos formales, espaciales, estructurales y simbólicos de la arquitectura. Desde los primeros días del siglo XX, las condiciones y las intenciones han seguido cambiando, y las convenciones de la arquitectura moderna se han extendido y agitado en nuevas combinaciones, pero no han sido revisadas en lo fundamental. Los arquitectos que por vez primera heredaron la tradición moderna en los años 1930 (Aalto, Terragni, Martienssen, Niemeyer, Barragán, Lubetkin y los demás) asimilaron los principios de los edificios paradigmáticos y ampliaron sus enseñanzas. Ni siquiera las reformulaciones exigidas por el cataclismo de la II Guerra Mundial desplazaron la mayoría de las premisas establecidas en el periodo ‘heroico’.


 


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 MONTANER. J.M., La Modernidad superada. Arquitectura, arte y pensamiento del siglo XX. Edit. Gustavo Gili. Barcelona, 1997.


págs.59-88. “ El racionalismo como método de proyectación: progreso y crisis” 


En el campo de la arquitectura, la mayoría de corrientes hegemónicas desde los años cuarenta han arrancado de una crítica parcial o total al racionalismo. El organicismo y el empirismo, expresado en Alvar Aalto y otros arquitectos nórdicos, se adherían a un racionalismo empírico y acumulativo. El expresionismo de Hans Scharoun, manifestado en obras como la sala de conciertos de la Filarmónica de Berlín (1956-1963), parte de experimentar fenómenos reales como el público escuchando música y otorgándoles una forma nueva, sin ningún a priori. O la arquitectura brasileña, desde la forma expresiva de Oscar Niemeyer, que margina la funcionalidad y precisión constructiva en defensa de la sensualidad y el irracionalismo, hasta el expresionismo de Lina Bo Bardi basado en una búsqueda programática y fenomenológica de una actividad artística que supere los condicionantes del racionalismo. Todos estos casos son buena prueba de que las experiencias más renovadas han partido de una corrección del racionalismo inicial sin renunciar, en ciertos casos, al funcionalismo.


Págs.159-180. ... Más tarde, el expresionismo abstracto y el Art Brut enriquecieron las morfologías de los arquitectos de la “tercera generación”: la fuerza liberada por el Dripping de Jackson Pollock - gestual y desinhibido- o por los monigotes ingenuos y espontáneos de Jean Dubuffet sirvió para inspirar las formas de cluster o racimo propuestas por Alison y Peter Smithson, George Candilis, Alexis Josic y Shadrach Woods, Aldo Van Eyck y otro arquitectos del Team X. Se trataba de una reacción de carácter formal contra la limitación de repertorios morfológicos establecidos por el racionalismo. Dichas formas se pueden rastrear en propuestas de morfologías urbanas, en tipologías edificatorias e, incluso, en los interiores de las llamadas “oficinas paisaje” de los años 70. En las configuraciones libres y ameboides utilizadas en los años 50, en obras de arquitectos como Jose Antonio Coderch, Oscar Niemeyer o André Bloc, se evidencian las influencias de las figuras desarrolladas por Joan Miró, Hans Arp y Alexander Calder....


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MONTANER Josep Maria., La modernidad superada. Arquitectura, arte y pensamiento del siglo XX . Gustavo Gili. Barcelona, 2002.


págs.25-58 “Espacio y antiespacio. Lugar y no lugar en la arquitectura moderna”


Louiis Kahn-sobre cuya sintonía con Heidegger ha vuelto insistentemente Norberg-Schulz- constituye un caso especial. Si bien recrea la idea de lugar en los interiores -que quedan totalmente cualificados por la luz, los valores simbólicos, las texturas, las formas, el confort-, en cambio su arquitectura, pensada como volúmenes autónomos, no interpreta el contexto como factor diferenciador. Esto es claro, por ejemplo, en el Instituto Indio para la Formación de Mandos, en Ahmedabad (1962- 1979) que tanto podría ser un college prototípico para Harvard como una obra concreta para la India. En muchas ocasiones, para Louis Kahn, Oscar Niemeyer o Roberto Burle Marx, el desafío es el de la transformación, el de crear lugar donde no existe, transformar el no lugar americano en lugar. En esto su actitud puede relacionar- se con la metáfora planteada por Heidegger: el puente que transforma el paisaje, aportando un "lugar" que une las dos riberas pero que a la vez hace que una se contraponga a la otra. Según Heidegger "el lugar no antes de la construcción del puente /... se origina sólo a partir del puente". No responde, por tanto, a una idea de integración sino de transformación.


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FRAMPTON Kenneth., “Regionalismo crítico: arquitectura moderna e identidad cultural” en Historia crítica de la  Arquitectura Moderna. Gustavo Gili. Barcelona, 1987.  


Págs. 317-331.El regionalismo se ha manifestado, por supuesto, en otros lugares de América: en Brasil, durante la década de 1940, en las primeras obras de Oscar Niemeyer y Affonso Reidy ; en Argentina, en la obra de Amancio Williams , sobre todo en su casa puente en Mar del Plata , de 1943-1945, y más adelante, en el Banco de Londres y América del Sur (1959) en Buenos Aires, obra de Clorindo Testa ; en Venezuela, en la Ciudad Universitaria de Caracas, construida entre 1945 y 1960 según el proyecto de Carlos Raúl Villanueva"


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