La autora de los libros de Harry Potter, J.K. Rowling, vivió en Oporto varios años, y esta librería sirvió de inspiración para las escaleras de Hogwarts en los libros que ésta autora publicó. Este es el motivo principal por el cual esta librería se hizo mundialmente conocida, en cierta forma es gracias a ella que podemos seguir disfrutando de la librería ya que por motivos económicos iban a cerrarla, gracias al tráfico de gente que dirigió la escritora hoy en día más que una librería es un parque temático para los fanáticos de la saga, un escenario de cuento.
Es una librería situada en el centro histórico de la ciudad de Oporto, Portugal. Está ubicada en la Rua das Carmelitas justo delante de la Torre de los Clérigos. Es uno de los edificios más emblemáticos del neogótico portuense, destacándose fuertemente en el paisaje urbano circundante.
Antes de entrar, la librería ya nos sorprende con su espectacular fachada de estilo neogótico y ciertos tintes modernistas. Observamos en dicha fachada un gran arco abatido y sobre el mismo un triple ventanal, y a ambos lados de este, dos figuras pintadas sobre la pared del edificio, una representa el Arte y la otra representa La Ciencia, ambas son obra del autor Jose Bielman. Un letrero recortado remata las ventanas, terminando la fachada en tres pilares rematados por chapiteles, con vanos de arquería de gusto neogótico. La decoración se complementa por motivos vegetales, formas geométricas y la designación “Lello e Irmão”, bajo las ventanas.
En su interior, la decoración nos transporta a hace 100 años, cuando la biblioteca fue construida. La unión de unas enormes estanterías de madera llenas de libros que suben desde nuestros pies hasta el techo recorriendo los dos pisos que posee la biblioteca, las paredes de yeso pintado imitando madera, una enorme vidriera situada en el techo que proyecta luz natural con monograma y el lema de la librería: “Decus in Labore” (orgullo por el trabajo) y una gran escalera ornamental, preciosa obra de ebanistería, que da acceso al piso superior labrada en madera y con forma bifurcada en dos direcciones a mitad del camino de la misma, que sugiere un laberinto borgeano lleno de aventuras, hacen que no se pueda olvidar una visita a esta librería.
Hay bustos que “decoran” la librería, que de por sí ya está bastante ornamentada, obra del escultor Romao Júnior, de destacados nombres de las letras portuguesas. Allí encontramos a Eça de Queiroz, Camilo Castelo Branco, Antero de Quental, Tomás Ribeiro, Guerra Junquiero… En el suelo aún se encuentran los raíles de las vagonetas que se utilizaban para transportar los libros de unos estantes a otros.
En virtud de su valor histórico y artístico, la librería ha sido reconocida como una de las más bellas del mundo por diversas personalidades y entidades.
Maria Eugenia TEIXEIRA