Print
Fotografía de Liao Yusheng

Salk Institute for Biological Studies

Instituto Salk de Estudios Biológicos
  • 1959 - 1965
  •  
  • KAHN, Louis Isadore
  • BARRAGAN MORFIN, Luis Adaptación   1965 - 1965
    El patio es estrictamente simétrico y vacío, como si se trata de una plaza italiana de un cuadro de Giorgio de Chirico, y se llevó a cabo en colaboración con Luis Barragán, quien propuso que debía ser una plaza de piedra con un eje de agua y no un jardín con vegetación, que hubiera desviado el esencialismo de la arquitectura de Kahn. Resulta muy reveladora esta sintonía entre Louis I. Kahn y Luis Barragán, otro arquitecto que también buscó y recreó las formas intemporales.
  •  
  • La Jolla. San Diego (California)
  • Estados Unidos
imagenes/3124_1.jpg imagenes/5626_1_33010616.jpg imagenes/3126_1.jpg imagenes/3127_1.jpg imagenes/3128_1.jpg imagenes/3129_1.jpg imagenes/3130_1.jpg imagenes/3131_1.jpg imagenes/3132_1.jpg imagenes/3133_1.jpg imagenes/3134_1.jpg imagenes/3135_1.jpg imagenes/3136_1.jpg imagenes/3137_1.jpg imagenes/3138_1.jpg imagenes/3139_1.jpg imagenes/3140_1.jpg imagenes/3141_1.jpg imagenes/3149_1.jpg imagenes/3150_1.jpg imagenes/3151_1.jpg imagenes/3152_1.jpg imagenes/3153_1.jpg imagenes/3154_1.jpg imagenes/3155_1.jpg imagenes/3156_1.jpg imagenes/3157_1.jpg imagenes/3158_1.jpg imagenes/3159_1.jpg imagenes/3198_1.jpg imagenes/3160_1.jpg imagenes/3161_1.jpg imagenes/5625_1_33010615.jpg imagenes/3162_1.jpg imagenes/3199_1.jpg imagenes/5627_1_33010617.jpg imagenes/3163_1.jpg imagenes/3200_1.jpg imagenes/3164_1.jpg imagenes/3165_1.jpg imagenes/3125_1.jpg imagenes/3201_1.jpg imagenes/3166_1.jpg imagenes/3167_1.jpg obras/36009_25.jpg imagenes/3168_1.jpg imagenes/3203_1.jpg imagenes/3169_1.jpg obras/36009_28.jpg imagenes/3170_1.jpg imagenes/3205_1.jpg imagenes/3171_1.jpg imagenes/3206_1.jpg imagenes/3172_1.jpg obras/36009_30.jpg imagenes/3173_1.jpg imagenes/3207_1.jpg imagenes/3208_1.jpg imagenes/3174_1.jpg imagenes/3175_1.jpg obras/36009_31.jpg imagenes/3176_1.jpg obras/36009_32.jpg imagenes/3177_1.jpg obras/36009_33.jpg imagenes/3178_1.jpg imagenes/3213_1.jpg imagenes/3179_1.jpg obras/36009_8.jpg imagenes/3217_1.jpg imagenes/3180_1.jpg imagenes/3181_1.jpg imagenes/3218_1.jpg imagenes/3182_1.jpg imagenes/3220_1.jpg imagenes/3183_1.jpg imagenes/3221_1.jpg imagenes/3184_1.jpg imagenes/3223_1.jpg imagenes/3224_1.jpg imagenes/3185_1.jpg imagenes/3227_1.jpg imagenes/3186_1.jpg imagenes/3187_1.jpg imagenes/3230_1.jpg imagenes/3231_1.jpg imagenes/3188_1.jpg imagenes/3232_1.jpg imagenes/3189_1.jpg imagenes/3234_1.jpg imagenes/3190_1.jpg imagenes/3235_1.jpg imagenes/3191_1.jpg imagenes/3192_1.jpg imagenes/3237_1.jpg imagenes/3193_1.jpg imagenes/3238_1.jpg imagenes/3194_1.jpg imagenes/3239_1.jpg imagenes/3195_1.jpg imagenes/3240_1.jpg imagenes/3196_1.jpg imagenes/3241_1.jpg imagenes/3146_1.jpg imagenes/3242_1.jpg imagenes/3147_1.jpg imagenes/3243_1.jpg imagenes/3148_1.jpg imagenes/3244_1.jpg imagenes/3245_1.jpg imagenes/3145_1.jpg imagenes/3248_1.jpg imagenes/3144_1.jpg imagenes/3143_1.jpg imagenes/3249_1.jpg imagenes/3252_1.jpg imagenes/3142_1.jpg imagenes/3253_1.jpg obras/28215_100.jpg obras/28215_101.jpg imagenes/3255_1.jpg imagenes/3257_1.jpg obras/28215_102.jpg imagenes/3258_1.jpg obras/28215_103.jpg imagenes/3261_1.jpg obras/28215_104.jpg obras/28215_105.jpg imagenes/3264_1.jpg imagenes/3266_1.jpg obras/28215_106.jpg imagenes/3215_1.jpg obras/28215_107.jpg obras/28215_25.jpg obras/36008_104.jpg obras/28215_26.jpg obras/36008_105.jpg obras/36008_25.jpg obras/28215_27.jpg obras/28215_28.jpg obras/36008_26.jpg obras/28215_29.jpg obras/36008_29.jpg obras/28215_30.jpg obras/36008_31.jpg obras/28215_31.jpg obras/36008_32.jpg obras/28215_32.jpg obras/36008_47.jpg obras/28215_33.jpg obras/36008_48.jpg obras/28215_34.jpg obras/36008_54.jpg obras/28215_46.jpg obras/36008_57.jpg obras/36008_59.jpg obras/28215_47.jpg obras/28215_48.jpg obras/36008_61.jpg obras/36008_64.jpg obras/28215_49.jpg obras/28215_50.jpg obras/36008_67.jpg obras/36008_68.jpg obras/28215_51.jpg obras/28215_52.jpg obras/36008_69.jpg obras/36008_70.jpg obras/28215_53.jpg obras/36008_73.jpg obras/28215_54.jpg obras/36008_75.jpg obras/28215_55.jpg obras/28215_56.jpg obras/36008_78.jpg obras/28215_57.jpg obras/36008_79.jpg obras/28215_58.jpg obras/36008_80.jpg obras/28215_59.jpg obras/36008_81.jpg obras/36008_85.jpg obras/28215_60.jpg obras/28215_61.jpg obras/36008_86.jpg obras/36008_87.jpg obras/28215_62.jpg obras/36008_88.jpg obras/28215_63.jpg obras/36008_8.jpg obras/28215_64.jpg obras/36008_90.jpg obras/28215_65.jpg obras/36008_91.jpg obras/28215_66.jpg obras/28215_67.jpg obras/36008_93.jpg obras/36008_94.jpg obras/28215_68.jpg obras/36008_96.jpg obras/28215_69.jpg obras/28215_70.jpg obras/36008_99.jpg obras/28215_71.jpg obras/28215_72.jpg obras/28215_73.jpg obras/28215_74.jpg obras/28215_75.jpg obras/28215_76.jpg obras/28215_77.jpg obras/28215_78.jpg obras/28215_79.jpg obras/28215_80.jpg obras/28215_81.jpg obras/28215_82.jpg obras/28215_83.jpg obras/28215_84.jpg obras/28215_85.jpg obras/28215_86.jpg obras/28215_87.jpg obras/28215_88.jpg obras/28215_89.jpg obras/28215_8_33010616.jpg obras/28215_90.jpg obras/28215_91.jpg obras/28215_92.jpg obras/28215_93.jpg obras/28215_94.jpg obras/28215_95.jpg obras/28215_96.jpg obras/28215_97.jpg obras/28215_98.jpg obras/28215_99.jpg

El Instituto Salk de Estudios Biológicos es posiblemente el edificio más poético y más importante de Kahn en Estados Unidos. 


 En el año 1959, el médico estadounidense de origen ruso Jonas Salk (descubridor de la vacuna contra la poleo) encargó a Louis Isadore Kahn la confección de un complejo (el Salk Institute for Biological Studies) que albergara un programa compuesto por una serie de laboratorios y viviendas. Se buscaba un espacio para la investigación y la divulgación científica, de gente comprometida que formase una comunidad.


  Kahn decidió una división tripartita del encargo: los laboratorios, las residencias y el lugar de encuentro (meeting place). … Tras las dos propuestas previas rechazadas, Kahn  sólo llegó a construir uno de los tres edificios, los laboratorios, adoptaban definitivamente una forma simétrica.


 Si en un principio Kahn pensó en los modelos antiguos que presentaban los monasterios,  las comunidades universitarias tradicionales, u otras formas de retiro intelectual. Al final llegó a la conclusión de que la materialidad del proyecto se debía conseguir mediante formas e instrumentos modernos de construcción y abstracción del espacio.


 Teniendo en cuenta que para Kahn la arquitectura se convertía en un acto espiritual, el solar elegido y su tratamiento para la construcción del proyecto se convertía en un elemento fundamental a tener en cuenta.


 La relevancia que adquiere este espacio a la hora de diseñar el complejo es total. Los volúmenes edificatorios se disponen a derecha e izquierda de un zócalo central perpendicular al mar, es decir, con una orientación este-oeste premeditada que, gracias a la iluminación solar, produce situaciones excepcionalmente fotogénicas. Además, con la intención de acentuar, todavía más, esa direccionalidad tan marcada, Khan dispone en el eje un canal de agua que finalmente desemboca en una pequeña fuente de travertino, situada a un nivel inferior al zócalo que enmarca el proyecto, potenciando más si cabe el valor de la plaza a través de una estética de la ausencia.


 El complejo edificatorio en sus distintas salas, resulta espacioso y se compone de dos volúmenes simétricos y paralelos que contienen una serie de laboratorios y despachos. Estos despachos cerrados en su visión frontal de entrada a la plaza, se abren hacia el mar. Los laboratorios se ubican en la parte central de cada volumen, dejando las alas para alojar los despachos y los núcleos de comunicación verticales. Las alas que dan a la plaza, que es donde se ubican los despachos independientes, se encuentra a una cota superior respecto al ala que da al jardín trasero, que es donde se ubican los núcleos de comunicación verticales y los baños. La comunicación entre los despachos y el cuerpo de laboratorios se efectúa a través de unas pasarelas de hormigón que, a su vez, contienen escaleras y un ascensor.


---


COLQUHOUN Alan.,"Pax americana: la arquitectura en Estados Unidos, 1945-1965" en La arquitectura moderna una historia desapasionada. Gustavo Gili. Barcelona, 2005.


p. 231-245. "La doble fidelidad de Kahn al organicismo estructural y al clasicismo – a un todo que aún no ha aparecido y a un todo que se ha perdido-  trasciende este esquema generalizado. El proyecto no construido para un centro comunitario judío en Trenton (1954-59) exhibe estas dos tendencias; en él aparece una nueva relación arbitraria entre la forma y la función. Las formas arquitectónicas ya no corresponder a relaciones casuales inmutables, como se suponía que pasaba en el funcionalismo. Se establece una retícula binaria en la que la única jerarquía fija se da entre los espacios positivos (servidos) y los negativos (servidores). Aparte de esto, puede insertarse cualquier combinación de funciones.


En el Instituto Salk de ciencias biológicas en La Jolla (1959-1965), resolvió el problema relegando el grueso del programa a dos enormes naves flexibles y restringiendo la expresión simbólica a los rígidos pabellones administrativos que dan a la plaza (en este caso hay una analogía con los pabellones de la Exposición Universal Colombina de Chicago)."


---


CURTIS William. J. La arquitectura moderna desde 1900. Edit. Phaidon. Hong Kong, 2006. 3ª edición en español. 1ª edición 1986 


 pág. 520-523 ...En el proyecto para el Instituto Jonas Salk de Ciencias Biológicas (1959-1965), junto a La Jolla, San Diego, California, Kahn tuvo que proyectar para una comunidad de científicos dedicados a la investigación intensa y continua. Otro arquitecto podría haber tratado de encarnar las aspiraciones progresistas de ese programa. Pero Salk no era un cliente corriente e insistía en que en que se explorasen las implicaciones humanas de la ciencia. Para Kahn, las referencias apropiadas parecían radicar en prototipos tales como monasterios u otras formas de retiro intelectual.


 Se planearon tres agrupaciones principales separadas unas de otras en el paisaje virgen con vistas al Pacífico: las zonas comunes de conferencias y asambleas (la Meeting House o ‘casa de reuniones’), la zona residencial (el Village o `pueblo`) y los propios laboratorios (la única parte construida), contenidos en bloques paralelos con un jardín acuático entre ellos. Los laboratorios eran de planta diáfana y podían modificarse a voluntad para satisfacer las necesidades de los diferentes experimentos; estaban definidos por vigas perforadas con un canto suficiente como para albergar toda un ‘planta de instalaciones’ con conductos y tubos ajustables. El piso inferior estaba colocado por debajo del nivel del terreno para reducir la altura del conjunto, y estaba iluminado por patios rehundidos. Los laboratorios estaban unidos por puentes a pequeños estudios que disfrutaban de vistas al jardín o hacia el mar; se hacía una distinción entre la sociedad del esfuerzo compartido y el mundo privado de la meditación.Estos estudios eran sustancialmente celdas amuebladas -o quizá cabinas- para la contemplación. Al exterior se expresaban mediante jambas de paneles de teca colocadas en planos de hormigón liso con juntas e incisiones muy cuidadas que hacían resaltar las sombras. El hormigón era del mismo color que el travertino usado en el pavimento del espacio externo, y el efecto global combinaba la nobleza con el refinamiento. Los planos diagonales de hormigón desnudo estaban claramente en deuda con Le Corbusier, pero la idea del edificio tenía su propia vida interior.


A veces se han hecho comparaciones entre el instituto Salk y conjuntos romanos antiguos como la villa Adriana en Tívoli o el palacio de Diocleciano en Spalato, pero esta ‘caza de la fuente’ contribuye relativamente poco a explicar el orden sublime del resultado. Kahn estaba empapado de historia, pero también rompió con ella, y aspiraba a lograr una presencia fundamental, un estado metafísico al que se refería confusamente como ‘grado cero’. No cabe la menor duda sobre el sentido de la antigüedad o de lo arcaico que hay en determinadas relaciones de Kahn (incluido el Salk), pero esto se conseguía con instrumentos modernos mediante los cuales se confería una resonante abstracción al espacio, a la estructura, a los materiales y a la luz.


 Aunque la planta del Instituto Salk indica una composición axial, las intenciones y la experiencia del edificio no son tan sencillas. Al igual que en varias de las obras de Kahn, nos aproximamos al emplazamiento por un camino indirecto a través del ‘filtro’ de una arboleda. La primera impresión es la de un recinto separado del mundo exterior por un foso y con una puerta central con escalinatas. Cuando llegamos más cerca, la vista se lanza hacia el infinito del horizonte del Pacífico, ‘enmarcado’, por decirlo así, por un proscenio. Una línea de agua, fina y traslúcida, parte la plataforma por la mitad, atrayendo el sol y la luz hacia el espacio. Luego el recorrido se desvía del eje debido a un banco de piedra que corta el camino. Los planos fugados de hormigón se disuelven en la luz. Las sombras son casi tangibles. Fue Luis Barragán (ese maestro de la ausencia) quien persuadió a Kahn para que no plantase ningún árbol y trabajase con un vacío. Con sus bancos bajos, sus estanques reflectantes, su pavimento proporcionado y su aire ritual, la ‘sala exterior’ del Instituto Salk adquiere el carácter de un escenario de filósofos donde las ideas pueden intercambiarse y los misterios de la naturaleza pueden estudiarse. Steven Holl, un arquitecto norteamericano de una generación más joven ha captado la atmósfera cósmica de este espacio: […] hay un momento del día en el que el sol, reflejándose en el océano, confluye con la luz reflejada ene el hilo de agua del canal que biseca el patio central. El océano y el patio se funden […]. La arquitectura y la naturaleza se aúnan en una metafísica del lugar […].


---


FRAMPTON Kenneth.,  Historia crítica de la  Arquitectura Moderna. Gustavo Gili. Barcelona, 1987. 


Pág.241-249.“El eclipse del New Deal: Buckminster Fuller, Philip Johnson y Louis I. Kahn 1934-1964”


Indica la realización de Kahn y su persistente influencia hoy el hecho de que el ‘concepto’ estuviera exactamente allí donde la arquitectura siempre empezó para él, aunque él fuese lo bastante flexible como para permitir que la ‘Forma’ inicial (el término de Kahn para señalar el ‘tipo’) quedara modificada por las exigencias del programa. Para él, construir seguía siendo un acto espiritual, y no es posible calificar de accidente el que su mejor labor se reservara para estructuras religiosas o extremadamente honoríficas. En muchos encargos subsiguientes, describió una alta connotación espiritual al programa, sobre todo, en el caso del centro de investigación que diseñó para el doctor Jonas Salk en La Jolla, California, entre 1959 y 1965. En este caso, la separación de todo el complejo en sectores de trabajo, reunión y estancia  parece haber librado a Kahn de la necesidad compulsiva de reducir el espacio del laboratorio a una forma ideal. La versión final de los Laboratorios Salk le indujo a aceptar una solución en la que los servicios estaban tan ‘reprimidos’ u ocultos como en cualquier edificio de oficinas de Mies van der Rohe. La previsión de Kahn respecto a toda una planta de servicios, de altura normal, debajo de cada laboratorio -disposición que hoy es plenamente utilizada- proporcionaba un espacio mucho más flexible que lo generalmente conseguido en Filadelfia. El complejo de reuniones Salk, no construido, fue también la primera ocasión en la que Kahn tuvo una oportunidad de desarrollar su concepto antireflejo de instalar ‘un edificio dentro de un edificio’, noción que había presentado ya, a nivel conceptual, en sus esbozos de 1959 para el consulado de los Estados Unidos en Luanda, Angola. Esta idea, destinada a quedar sin construir, ni siquiera en La Jolla, se convertiría en el tema principal de su magnífico edificio para la Asamblea Nacional, construido de 1965 a 1974 en Dacca, en el Pakistán Oriental (hoy Bangladesh).


---


MONTANER, Josep María.,  Sistemas arquitectónicos contemporáneos. Gustavo Gili. Barcelona, 2008. 


Págs.. 116-131. “Estructuras de la memoria” 


Las ideas de Kahn se hacen patentes en el proyecto de Salk Institute de investigaciones biológicas, un encargo que recibió en 1959 de manos de Jonas Salk, el inventor de la primera vacuna efectiva contra la polio, quien quería promover un prestigioso centro de investigación dedicado a las ciencias, las humanidades y las artes, pensado para alojar a diez premios Nobel y sus equipos.


 Desde la primera visita al lugar del futuro Salk Institute en enero de 1960, Kahn decidió una división tripartita del encargo: los laboratorios, las residencias y el lugar de encuentro (meeting place). El primer proyecto estaba disperso en el paisaje y, a su vez, articulado por líneas de flujo, otorgando una forma axial y frontal al edificio de reuniones, frente al acantilado; las residencias eran casas unifamiliares en hileras curvas y sinuosas, como si de un poblado se tratara; y los laboratorios, con reminiscencias de los laboratorios Richards en Filadelfia, estaban conformados por dos grupos de torres y cuatro bases circulares. Entre los laboratorios y el edificio colectivo se situaban otros edificios comunes.


  El segundo proyecto, de 1960-1962, adoptaba una forma mucho más unitaria y articulada: los laboratorios componían un gran sistema compacto de cuatro naves iguales con jardines entre ellas y un patio de servicio en la parte trasera; las residencias se habían agrupado en una hilera curva, menos sinuosa; y el centro de reuniones había adoptado la forma de edificio organizado en torno a un claustro y con un auditorio independiente en forma de teatro romano, en el que se sintetizaban  distintas influencias: la Villa Adriana en Tívoli, la Alhambra de Granada y los monasterios de Saint Gall y de San Francisco de Asís.


  Tras las dos propuestas previas rechazadas (Kahn solo llegó a construir uno de los tres edificios), los laboratorios, adoptaban definitivamente una forma simétrica, partían del lenguaje lecorbusierano. En la tercera resolución de junio de 1962, y que se terminó en 1965, las residencias y el lugar de encuentro, nunca realizados, mantenían una forma similar al segundo proyecto: las residencias, con calles peatonales y jardines, tenían ya una forma casi rectilínea y el edificio para reuniones estaba resuelto con más precisión en cada una de sus partes, poniendo más énfasis en las distinciones jerárquicas y en las conexiones. Solo el edificio de los laboratorios había cambiado, en él se sintetizaba clasicismo con alta tecnología. En esta solución final se creaban tres planta intermedias entre las tres plantas libres de los laboratorios, construidas con estructuras de vigas Vierendeel que permiten el paso , registro y actualización de todas las instalaciones; unos espacios servidores para las tres plantas libres de los laboratorios, que son los espacios servidos. En este caso la relación entre espacios servidores y servidos no se lleva a cabo en horizontal, sino en vertical, en la sección.


    Orientado hacia el patio y frente a los dos bloques de los laboratorios se encontraban las torres de estudio y salas en cuatro plantas siguiendo la estructura de cinco escaleras en cada uno de los dos bloques.


     En este, como en otras obras monumentales de Kahn, fue clave la colaboración del ingeniero August Komendant 10 quien conseguía que a las inspiraciones formales de Kahn les pudiera corresponder una adecuada solución estructural y tecnológica, en este caso los muros de hormigón-con un acabado tan perfecto y monumental que rememora el travertino romano- y las plantas de instalaciones en el espacio creado por las vigas Vierendeel. Se consigue que el hormigón, de fractura cuidadisima entone con el suelo de travertino del patio y se creen ciertas resonancias con la arquitectura romana.


   Al no poder realizar el edificio para reuniones, la solución final de los laboratorios, tan axial y simétrica, con el vacío del patio, rememora de manera abstracta el claustro porticado de un monasterio, el precedente que había inspirado la solución no realizada del lugar de encuentro.


   El patio es estrictamente simétrico y vacío, como si se trata de una plaza italiana de un cuadro de Giorgio de Chirico, y se llevó a cabo en colaboración con Luis Barragán, quien propuso que debía ser una plaza de piedra con un eje de agua y no un jardín con vegetación, que hubiera desviado el esencialismo de la arquitectura de Kahn. Resulta muy reveladora esta sintonía entre Louis I. Kahn y Luis Barragán, otro arquitecto que también buscó y recreó las formas intemporales.


   En definitiva, el vacío que crea esta arquitectura de hormigón y madera teka, frente a la costa del Pacífico, sobre el acantilado, define una quinta fachada hacia el cielo, un escenario privilegiado para la meditación de los científicos; una magnífica plaza intemporal definida por la arquitectura moderna, que mira hacia el tiempo, lejano y suspendido, en el horizonte que divide mar y cielo.


--- 


ROSA Joseph., Louis I. Kahn 1901-1974. Espacio iluminado. Edit. Taschen. Colonia, 2006.


p.43 El Instituto Salk de Estudios Biológicos es posiblemente el edificio más poético y más importante de Kahn en Estados Unidos. Situado en la Jolla (California), sobre un acantilado que domina el océano Pacífico, la estructura posee un patio exterior que evoca la majestuosidad de una catedral y presenta elementos sencillos, tales como un estrecho canal de agua que discurre por su plaza central y que baja en cascada hasta una serie de estanques inferioresLas proporciones de este patio exterior - su anchura en contraste con la altua vertical de las torres de estudio adyacentes - crean una bella escala de carácter intemporal. Las simétricamente dispuestas torres de estudio, que se alzan a cada lado del pario, presentan paredes en ángulo de 45 grados que permiten unas vistas espectaculares. Estos elementos verticales de cuatro pisos con aspecto de pabellón están conectados con los edificios de mayor tamaño de los laboratorios, que demarcan los límites de este gran complejo. El encofrado altamente controlado del hormigonadero in situ crea una elegante modulación de superficier que a veces se yuxtaponen con paneles de madera deteca, dando escala al patio así como un sentido de grandeza monumental a todo el complejo.


En 1959 Josas Salk, fundador del Instituto Salk, buscaba el arquitecto adecuado para diseñar su nuevo Instituto de Estudios Biológicos en San Diego (California). Un amigo de Salk asistió a una conferencia de Kahn y le sugirió que a Salñ podrían gustarle sus ideas sobre arquitectura. Cuando Kahn y Salk se encontraron, se dieron cuenta de que tenían intereses intelectuales parecidos, y Kahn fun contratado. Salk no facilitó ninún programa formal, sino que éste surgió de su conversación con el arquitecto, en la que le expuso cómo concebía el centro. El Ayuntamiento de San Diego proporcionó el terreno para el Instituto. A Salk se le ofrecieron varias ubicaciones entre las que escoger y se llevó a Kahn con él para que le ayudara a elegirla. El lugar escogido es un sensacional terreno situado en un acantilado de la costa en la zona de la Jolla. Kahn realizó numerosas propuestas para su plan maetro antes de decidirse por la versión desarrollada. No obstante, en 1965, el coste de la construcción había excedido los 14 millones de dólares, el plan maestro no se había terminado y faltaban por construir las viviendas del personal así como otras estructuras auxiliares. El compromiso que Kahn y Salx contrajeron al principio del proyecto proporciona una plantilla concisa a partir de la cual puede concluirse el plan maestro a medida que el instituto crezca en escala y majestuosidad. 


 ---


En el año 1959, el médico estadounidense de origen ruso Jonas Salk (descubridor de la vacuna contra la poleo) encargó a Louis Isadore Kahn la confección de un complejo (el Salk Institute for Biological Studies) que albergara un programa compuesto por una serie de laboratorios y viviendas. Se buscaba un espacio para la investigación y la divulgación científica.


El solar elegido para la construcción del proyecto fue un sitio elevado que da al mar, situado en La Jolla (California), en la costa oeste de Estados Unidos. Se trata de un lugar cercano a la ciudad de San Diego.


La relevancia que adquiere este espacio a la hora de diseñar el complejo es total. Los volúmenes edificatorios se disponen a derecha e izquierda de un zócalo central perpendicular al mar, es decir, con una orientación este-oeste premeditada que, gracias a la iluminación solar, produce situaciones excepcionalmente fotogénicas. Además, con la intención de acentuar, todavía más, esa direccionalidad tan marcada, Khan dispone en el eje un canal de agua que finalmente desemboca en una pequeña fuente de travertino, situada a un nivel inferior al zócalo que enmarca el proyecto.


El complejo edificatorio en sus distintas salas, resulta espacioso y se compone de dos volúmenes simétricos y paralelos que contienen una serie de laboratorios y despachos. Los laboratorios se ubican en la parte central de cada volumen, dejando las alas para alojar los despachos y los núcleos de comunicación verticales. Las alas que dan a la plaza, que es donde se ubican los despachos independientes, se encuentra a una cota superior respecto al ala que da al jardín trasero, que es donde se ubican los núcleos de comunicación verticales y los baños. La comunicación entre los despachos y el cuerpo de laboratorios se efectúa a través de unas pasarelas de hormigón que, a su vez, contienen escaleras y un ascensor, ambos de hormigón.


La dualidad que caracterizó a Khan durante toda su carrera es visible en el Salk Institute. La plaza de acabado pétreo contrasta enormemente con el espacio ajardinado trasero. Además, el carácter brutalista y monumental que se le quiere otorgar al hormigón en este proyecto constata con la calidez que aportan las carpinterías de madera.


En cuanto a la construcción, destaca el empleo de grandes vigas Vierendeel de hormigón que permiten salvar grandes luces, lo que hace innecesario la colocación de pilares en el cuerpo de laboratorios. También destaca la pulcritud con la que realizaron los encofrados del hormigón armado, lo que produjo una gran calidad en el resultado final.


Este ejemplo de arquitectura moderna, a pesar de la domesticidad de sus espacios, contiene rasgos de cierta monumentalidad, potenciando a través de la plaza su carácter representativo.


Aitor GONZÁLEZ DE GARIBAY

Up