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Págs. 942-1023.”El cambio de los años sesenta”
4.-Las nuevas utipías y el debate sobre la ciudad
Más difícil es la aplicación de estas ideas a los edificios de cada día: los centros comerciales de Cumbernauld (H. Wilson y G. Copcutt, 1960-1970) y de Runcorn (R. Harrison, 1967); el Centro de comunicaciones Yama- nishu en Tokio (K. Tange. 1967); el Centro Georges Pompidou en París (Piano, Rogers y Franchini, que ganan el concurso de 1970; el conjunto londinense de Brunswick Centre (L. Martin y P. Hodgkinson, 1962-1970). La conformación es la deseada -una multiplicidad de elementos ensamblados en una estructura única pero la movilidad de los elementos se pierde por el camino. Estos edificios, así como el Hábitat de Safdie en Montreal, son «esculturas monolíticas que aluden a una adaptabilidad irrealizable en la construcción real». 19 Kurokawa, en sus rascacielos de Nagakin, y Watanabe en Tokio, intentan un verdadero montaje de cápsulas separadas, pero esta experiencia no tendrá continuidad. La gran dimensión más allá del kilómetro se alcanza en las realizaciones relacionadas con los sistemas de transporte: los nuevos aeropuertos norteamericanos de Dallas (1966) de Boston (1976) y la terminal de automóviles en un Nuevo del puente George Washington en Nueva York (que comprende el garaje de Negubide 1966). En varias intervenciones públicas ya señaladas (Barbican, 32 Thamesmead), la excesiva complejidad de los niveles de circulación deriva de losmodelos teóricos de la primera mitad de los años sesenta, y será abandonadasólo cuando se haga patente que la animación de estos dos espacios resulta imposible.
Más tarde, en los años setenta, esta búsqueda encuentra su justa medida y una concreción arquitectónica cuando se aplique a los grandes espacios cerrados (que se hacen posibles gracias a la nueva tecnología de las cubiertas acristaladas y, a además, así lo exige el clima de los países más fríos). Hay que señalar sobre todo los ejemplos canadienses: el Eaton Centre de Toronto, de E.H. Zeidler; el Scarborough Centre, de A. Moriyama , y las oficinas públicas en el centro cívico de A.C. Erickson, en Vancouver . La presencia conjunta de muchos elementos pequeños en un ambiente de grandes dimensiones, la movilidad (de los peatones, no de los volúmenes construidos) se convierten en realidades experimentales y practicables.