Se trata de un estudio profundamente crítico con la ya centenaria herencia que nos ha dejado el Movimento Moderno. El “Modernismo” que así llama el autor al conocido en España como Movimiento Moderno, se trata de una estilo arquitectónico más. Un estilo que se ha impuesto internacionalmente, y que es el origen y la causa de muchas de las respuestas antiurbanas que existen en nuestras ciudades. A raíz de la imposición del Modernismo, se han uniformizado y globalizado los resultados arquitectónicos, eliminando la pluralidad de lenguajes. Curiosamente en un mundo occidental que presume de dicha pluralidad y de la libertad de elección. Con un texto irónico (nos habla de acrobatismo arquitectónico / arte de hacer lugares / ciudad policéntrica y polinuclear / era posthidrocarburos / manhattanismo creciente / rascasuelos / tecnotriunfalismo / compacidad y mezcla de usos….) y con unos dibujos originales y pedagógicos, el autor va analizando las causas y consecuencias de esta “dictadura” del estilo único. Se han perdido los oficios artesanales y el inmenso potencial de lenguajes que estos mostraban, empobreciendo el maquinismo las formas y los sistemas constructivos vigentes durante muchas generaciones.

En la actualidad, la inminente entrada en la era post-hidrocarburos, está haciendo que la sociedad sea cada vez más sensible con los aspectos relacionados con la sostenibilidad. Se presta mayor atención a los sistemas tradicionales de construcción y al uso de los materiales cercanos y reciclables. Poco a poco se va produciendo, por el imperativo de la necesidad, una vuelta a unos modelos que el Modernismo calificaba de obsoletos.

El autor a través de las distintas páginas, explica las razones por las que defiende un urbanismo de raíz tradicional, analizando ejemplos que ha llevado a cabo a través de sus obras.