PATERS, Nils., Jean Prouvé. 1901 – 1984. La dinámica de la creació., Edit. Taschen. Madrid. 2009
Págs. 50-51. “El edificio realizado en 1934 por los arquitectos Paul Herbé y Maurice Louis Gauthier en la ciudad del norte de Francia, Lille, se utilizaba antes de la guerra como nave para exposiciones. Durante la Segunda Guerra Mundial sufrió grandes daños y en 1946 fue reparado provisionalmente. Se reconstruyó para la Exposición Internacional de Textiles celebrado en 1951. El ingeniero Désiré Douniaux se encargó de la configuración de la fachada. Para ello proyectó una estructura portante de 2,5 metros de fondo que también servía para suspender publicidad. A mediados de 1950, Prouvé se encargó del despiece y de la ejecución de sus obras.
Toda la construcción, articulada en soportes verticales perforados y uniones horizontales, descansaba sobre los soportes de acero afilados que marcaban las entradas. La fachada estaba dividida en 990 paneles de vidrio macizos cuyo montaje requería una total exactitud de ajuste. Los talleres de Prouvé recibieron también el encargo para la realización de las puertas, tiradores y ventanillas.
La radical apertura de su concepción estructural convierte al Grand Palais de la Foire en el precursor de muchos edificios modernos como, por ejemplo, el Centro Pompidou de París (Renzo Piano, Richard Rogers y Giafranco Franchini) o el Lloyds Bank de Londres (Richard Rogers). Este edificio sirvió de modelo para muchas construcciones de alta tecnología cuyas estructuras portantes fueron utilizadas como expresión estética. El derribo de este fascinante edificio en 1987, durante la realización del proyecto Euralille, fue comentado por Peter Sulzer, autor del índice alfabético de la obra de Prouvé con las siguientes palabras: <