FRAMPTON Kenneth., Historia crítica de la  Arquitectura Moderna. Gustavo Gili. Barcelona, 1987. 

Págs.64-73 "El racionalismo estructural y la influencia de Viollet-le Duc; Gaudí, Horta, Guimard y Berlage, 1880-1910 “ 

El Parque Güell de Gaudí, surgió como la cristalización sin inhibiciones de su visión estática. Aunque el parque gozaba de una visión espectacular, los únicos edificios que se completaron en él fueron la puerta de entrada, la gran escalinata que conducía al mercado cubierto de la parte superior, y la propia vivienda de Gaudi. La bóveda ondulante e irrepetible del mercado estaba soportada por sesenta y nueve columnas dóricas grotescas, en tanto que su techado, limitado por un banco contínuo y serpenteante tenía la misión de actuar como arena o escenario al aire libre. Este perímetro exótico, recubierto por mosaico, terminaba en una explanada que a su vez se fundía con la construcción naturalista y casual, a base de grava y cántaros rodados del resto del parque. El parque en sí, quedaba estructurado por senderos sinuosos que, allí donde era necesario se apoyaban en contrafuertes de bóveda, cuya forma sugería troncos de árbol petrificados.