Inprimatu

LUPFER Gilbert, SIGEL Paul., Gropius 1883-1969. Propagandista del nuevo diseño. Edit Taschen. Köln,2006


Págs.23-25. "En 1913 y gracias a la mediación de su protector Karl-Ernst Osthaus, se le encargó a W. Gropius para 1914 la construcción de un edificio ejemplar que uniese las funciones de fábrica y oficinas, con motivo de la gran exposición del Deutscher Werkbund en Colonia. Por un lado erigió uno de los mayores complejos construidos de la exposición, que debía ser una "muestra de los logros de la fabricación industrial y artesanal" y por otro lado, la exposición se convertiría en un foro que le garantizaría un protagonismo muy rentable. Al mismo tiempo la exposición de Colonia era la primera gran presentación de ideas y objetivos del Deutscher Werkbund. Esta organización fundada en 1907, estaba formada por  un grupo de arquitectos, artesanos y empresarios, y tenía el objetivo de conseguir una mejora de la calidad en la producción industrial a fin de lograr con ella una optimización funcional y estética de los productos de la industria alemana orientada al mercado internacional. Junto al edificio de Gropius, que se había incorporado a la Werkbund en 1919, se situaron obras de otros de sus miembros, como el teatro de Henry van de Velde, el pabellón austriaco de Josef Hoffmann o el mágico pabellón de cristal de Bruno Taut, que se hizo famosos en la exposición de Colonia. Pero la exposición ofrecía también un marco para la controvertida cuestión de la postura que debía adoptar el Deutscher Werkbund respecto a la relación entre la producción industrial y el diseño individual artístico. Entre la tipificación defendida por H. Muthesius y el individualismo defendido por Henry Van de Velde.


En el pabellón expositivo de Gropius podemos ven en parte este debate entre las dos posturas antes citadas. Su complejo representivo, unía la monumentalidad con los motivos típicos de la arquitectura del Movimiento Moderno arquitectónico, mediante la disposición de cada uno de los componentes constructivos y, sobre todo, por el diseño de las fachadas. Tal y como Gropius había proclamado ya en su conferencia Monumentale Kunst und industiebau (Arte Monumental y construcción industrial) de 1911, el complejo de Colonia se caracterizaba tanto por la clara disposición de cada uno de los elementos, como por la secuencia y serialidad. En efecto, la construcción simétrica, compuesta por los edificios de entrada y de oficinas así como por la nave de máquinas trasera, presentaba una articulación aditiva de diversos cuerpos constructivos, unos paños ciegos de ladrillo y unas superficies vidriadas claramente separadas entre sí, así como una entrada con carácter de pórtico que recordaban las construcciones representativas antiguas.  A todo ello se unía por un lado, reminiscencias de la influencia de Behrens y, por otro, una especie de recuerdo a Frank Llpoyd Wright en la forma cúbica , la diferenciación entre materiales y el equilibrio entre elementos de soporte y carga típicos del arquitecto americano antes de la I Guerra Mundial. Pero también las cajas de escaleras en las esquinas del edificio, totalmente acristaladas, y el muro cortina del lado del patio de entrada del edificio de oficinas acentuaban claramente rasgos de una estética constructiva moderna de la que ya estaba impregnada la fábrica Faugus. Esta monumentalidad de la construcción se extendía también a la nave de las máquinas, cuya estructura de cubierta no estaba completamente acristalada. De frente se cerraba parcialmente con un muro que bordeaba el hastial, generando un gran contraste entre superficies y materiales, confiriendo a la construcción una fuerte corporeidad. Los numerosos murales y las esculturas de Georg Kolbe, Richard Sheibe o Gerhard Marck dispuestos dentro o en las inmediaciones del edificio de oficinas, subrayan las enormes ambiciones artísticas de la fábrica modelo.


El pabellón de cristal de la Deuter Gasmotorenfabrik, también proyectado por el estudio de Gropius y lindante con el citado complejo fabril, presentaba una síntesis similar de monumentalidad y estética constructiva.


 Una vez finalizada la exposición el complejo se conservó pero fue demolido tras la I Guerra Mundial. Aunque la historiografía del Movimiento Moderno ha tratado el complejo de Colonia con más reservas que la fábrica de Fagus (posiblemente por su representativa monumentalidad), el primero constituye un claro ejemplo de la búsqueda de Gropius de una síntesis de funcionalidad acorde con los requerimientos, sinceridad constructiva, grandeza y monumentalidad."


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BENEVOLO, L.,  Historia de la arquitectura moderna. Edit. Gustavo Gili. Barcelona, 1987.


Pág. 401-437.“La formación del Movimiento Moderno en Europa entre las dos guerras mundiales. Las condiciones de partida” 


1.- El "Deutscher Werkbund" y la nueva arquitectura alemana.


En la otra obra importante de Gropius antes de la primera guerra mundial, la fábrica-modelo de la Exposición del Werkbund en Colonia, en 1914, el delicado equilibrio de la Fagus se altera. Aquí las exigencias representativas son totalmente preponderantes y el lenguaje de Gropius absorbe una cantidad de sugerencias formales de Wright, de Behrens, de la Halle des Machines parisiense de 1889, no siempre felizmente asimilada. Sin embargo, su manera de componer es siempre ágil y articulada, sobre todo en el patio con los dos garajes que unen el cuerpo de las oficinas con la sala de las máquinas, y muchos detalles son excelentes, como las dos escaleras helicoidales totalmente visibles desde el exterior, dentro de su envoltura de cristal. 


La personalidad de Gropius tiende desde el principio a la comprensión y mediación entre las tesis y las corrientes más opuestas: en aquella época, por una vez, esta tendencia está a punto de caer en una especie de eclecticismo, debido quizás a la atmósfera forzadamente conciliadora de la Exposición de 1914 y del Werkbund, donde se mueven fuerzas divergentes. Es útil considerar, como comparación, las otras obras construidas en esta ocasión: el salón de fiestas de Behrens, el pabellón austriaco de Hoffmann, el teatro con escenario dividido en tres partes de Van de Velde, cada uno con su propio carácter marcado y exclusivo. 


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KOSTOF, Spiro., Historia de la arquitectura. Alianza Editorial. Madrid 1988. Tomo 3


págs.1167-1209. “Los ensayos de la modernidad”


 pág. 1187.Hacia una arquitectura del siglo XX.


pág. 1194. Europa entre la tradición y la rebelión.


En la fábrica de hormas de zapatos Fagus en Alfeld-ander-Leine, dos años posterior, y en la fábrica modelo para exhibición de Deutsche Werkbund de 1914 en Colonia, cerca de la Casa de Cristal de Taut, Gropius modificó esta fórmula de Behrens envolviendo el edificio en cristal, sin pilares terminales de mampostería, y dejando ver en estas esquinas traslúcidas escaleras en espiral. En la fábrica modelo, las escaleras se levantan en sus cajas de cristal por fuera de dos de los pabellones de los extremos con tejados planos voladizos tomados de Wright.


Para apreciar lo absolutamente distintivo que era verdaderamente este revestimiento de una moderna fábrica industrial, no tenemos más que fijarnos con atención en el tratamiento del mismo tipo constructivo en manos del ala expresionista de la Werkbund. Nuestra ilustración muestra la planta química de Luban, realizada por Poelzig (1869-1936), que es contemporánea exacta de la Fábrica Fagus de Gropius . Acertaríamos al asociar esta construcción de ladrillo desornamentada y audazmente masiva, con sus airosas filas de ventanas cuadradas y semicirculares, con el Free Styleinglés; la estética del movimiento del Arts and Craftsen contraste con la de la Primera Edad de las Máquinas.


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GIEDION S., Espacio, tiempo y arquitectura. Edit. Edit. Reverté. Barcelona, 2009.


Págs. 247-675.“El espacio-tiempo en el arte, la arquitectura y la construcción” 


Pág.477.  Nuevos elementos en la fábrica modelo de Gropius en Colonia. La 'Fabrik', la fábrica modelo y edificio de oficinas levantado por Gropius en la exposición del Werkbund de 1914 en Colonia (figura 292), tenía una terraza cubierta para bailar en laazotea, una sala de maquinaria y garajes abiertos en la parte posterior. Sin embargo, elconjunto presentaba algunos rasgos arquitectónicos que le conferían un carácter nuevo. Antesde esto, en la fábrica Fagus, Gropius había descartado el cerramiento habitual de piedra de laescalera y lo había reemplazado por una caja de hierro y vidrio; repitió este recurso en eledificio de Colonia, pero lo trató de un modo enteramente nuevo. En este edificio habíaescaleras helicoidales totalmente envueltas en vidrio; parece un movimiento capturado einmovilizado en el espacio (figura 293).


 Nuestros sentidos, esclavos de hábitos adquiridos durante siglos, buscan automáticamente los soportes de las partes salientes, como estas escaleras. La nueva concepción del espacio, con su impulso hacia las partes y superficies libremente flotantes, nos lleva exactamente en la dirección contraria; busca esa clase de sensación estética que resulta cuando la relación entrela carga y el soporte ya no es obvia como tradicionalmente lo era.


En el edificio de Gropius en la exposición de Colonia (lamentablemente destruido por el fuego durante los años de guerra), es de destacar que la cubierta se trató con el mismo cuidado y destreza que se dedicaron a otras partes integrantes del conjunto. Las terrazas superiores proporcionan espacio para el ascensor y para bailar, y toda la superficie estaba unificada mediante un jardín cubierto. Esos detalles nunca son resultados casuales o accidentales; precisamente porque dejan atrás los avances coetáneos, sólo pueden ser creados por mentes que están inconscientemente en contacto con el futuro.


 


 

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