Colin Faber destaca la fructífera que fue la colaboración entre Candela, de la Mora y López Carmona, al haber dado lugar a obras donde la serenidad y el buen gusto son temas evidentes. Este es el caso de la primera bóveda de arista que se proyectó en el estudio de Candela, formada por la intersección de los hypars con una plnata de 15x26 m y una altura de 8.25 m en el punto más alto de los arcos. Se construyó en el tercer nivel de un edificio de oficinas (La Bolsa de Valores de México) que alcanzó 8 niveles en la parte frontal de la construcción. Candela necesitó un año para llegar a la solución de colocar cuatro puntos da apoyo, a partir de los cuales se elevaban las parábolas que van girando en su acceso y se transformal en paraboloides hiperbólicos cruzados en el espacio, del mismo modo que las bóvedas de crucería románicas formadas por la intersección de los cilindros; solo que para el caso moderno, la concentración del desahogo del peso había que llevarlo hasta un punto en casa esquina del rectángulo. Candela diría más adelante sobre el desarrollo de sus investigaciones en las membranas de hormigón: "... donde realmente descubrí el modo de trabajar con hypars fue en la Bolsa de Valores, con de la Mora y Lópoez Carmona. Esta fue la primera obra en la que empecé a estudiarlo".
Enrique X. DE ANDA ALANÍS