Inprimatu

FRAMPTON Kenneth., Historia crítica de la  Arquitectura Moderna. Gustavo Gili. Barcelona, 1987.  


Pág.98-101.“Henry van de Velde y la abstracción de la empatía, 1895-1914”  


Después de Gottfried Semper y Peter Behrens , Van de Velde siempre había tratado de reforzar estos nexos socioculturales a través del teatro , concibiendo su unión de actores y espectadores como la forma más elevada de la vida espiritual y social , Directamente influenciado por escenógrafos como Max Reinhardt y Gordon Craig , se dedicó a perfeccionar el escenario tripartito, formulado por primera vez en un proyecto para el Teatro Dumont de Weimar en 1904. En 1911 volvió a ese tema en el encargo que se le hizo para el Théatre des Champs-Elysées , en París, realizado por Auguste Perret en 1913 pero en una forma modificada, y también en su teatro de la Exposición Werkbund de Colonia en 1914. El teatro Werkbund , muy expresivo pero de vida efímera, fue la apoteosis de su labor anterior a la guerra. Erich Mendelsohn escribió al respecto: "Sólo Van de Velde, con su teatro, busca en realidad una nueva forma. Hormigón utilizado según el estilo Art Nouveau pero vigoroso en concepción y expresión" . Sus masas salientes demostraron el dominio magistral de Van de Velde sobre la forma de tal manera que más tarde servirían como modelo para los perfiles de la Torre Einstein de Mendelsohn , construida en Potsdam en 1919.


El tan admirado Teatro Werkbund sería la última formulación de la estética "formafuerza" de Van de Velde . Fusionar al actor con la audiencia y el auditorio con el paisaje, como en las arenas al aire libre del hombre neolítico, era algo que aparecía como una expresión empática de carácter único. Desde luego, semejante expresión no podía encontrar lugar en la modesta casa modular prefabricada que Van de Velde construyó para sí mismo después de la primera guerra mundial. El sueño Werkbund de un mundo transformado por la gute Form y el monopolio industrial resultó ser tan vano como las esperanzas reformistas de la burguesía socialmente consciente cuyo mecenazgo de cincuenta años sobre los movimientos Arts and Crafts y Art Nouveau llegaron a un brusco final a causa de la primera guerra industrializada . Ya no era posible elaborar fantasías acerca de una sociedad transformada a través del arte, el diseño industrial y el teatro, en una época en que facilitar una vivienda mínima era una cuestión de la mayor urgencia


---


FUSCO Renato de .,  Historia de la arquitectura Contemporánea. Ed. Celeste. Madrid,1992. 


Págs. 188-204.“ Las obras del Protoracionalismo. La casa de la rue Franklin, La casa Steiner, la fábrica de turbinas AEG de Berlin, El Werkbundtheater“ 


El Werkbundtheater


Una variante del proto-racionalismo, significativa en cuanto que obra maestra arquitectónica de un artista que fue un precursor del Art Nouveau, nos lo ofrece el teatro construido por Henry Van de Velde para la exposición que organizó el Werkbund en Colonia en 1914. El edificio, hoy destruido, presentaba una planta marcadamente simétrica y un carácter de clasicismo novecentista que inducen a clasificarlo sin duda en el proto-racionalismo, aunque conservase algunas fluencias lineales; código-estilo al que contribuyó no poco la obra versátil de Van de Velde. El organismo unitario del escenario y la sala estaba precedido por un espacio de entrada y flanqueado a ambos lados por un foyer, de la misma longitud que la sala, al que se accedía mediante escaleras dispuestas simétricamente en el nivel de la galería. A los lados del escenario, como si fuera el transepto de una iglesia con planta de cruz, estaban los locales de almacén, de los aclares y del servicio. El diseño del escenario, proyectado por un arquitecto amigo de Gordon Craig, «el reformador de la escenografía», y por el director Max Reinhardt, era lo más significativo. Constaba de un espacio en el que se ocultaba la orquesta, una escena semicircular con un fondo de fábrica a modo de ábside y un proscenio dividido en tres que permitía el cambio de «lugar» durante la representación o la visión unitaria de la escena, re- presentando poco estorbo los elementos fijos que definían la partición. En la volumetría externa, el teatro expresaba una por una todas las partes interiores: el más alto de todos era el volumen de la zona escénica, después el de la sala. seguido por el de los foyers y el «transepto», a un mismo nivel, siendo las partes más bajas las que contenían los bares y las salidas de emergencia laterales. Pero inde-pendientemente de esta perfecta correspondencia entre el interior y el exterior, difícil de realizar en un teatro, y la considerable relación entre las diversas partes y el conjunto, el edificio interesaba también por su disposición en el paisaje. «La composición arquitectónica del Teatro de Colonia, igual que en el interior produce un estado de ánimo de intenso intercambio entre espectadores y actores, crea en el exterior una simbiosis entre el paisaje de la orilla del Rin y el edificio: uno fluye admirablemente en las líneas del otro.» Estas últimas observaciones nos recuerdan la teoría del Einfühfung y en ella pensábamos cuando en el inicio de este párrafo definimos el Werkbundtheater como una variante del proto-racionalismo. Habiendo asociado en las páginas precedentes este código-estilo más a la «abstracción» de que habla Worringer que ni Einfühlung, la aparición de esta referencia teórica en la obra examinada nos induciría a incluirla ahora en el ámbito del Art Nouveau mejor que en el protoracionalista. Sin embargo, si pensamos en la fecha de su realización y en su configuración lingüística nos parece indudable su adscripción al proto-racionalismo, con la única variante de que, aun con grandes concesiones a la «abstracción» —pensemos en las simetrías rigurosas que informan la obra—, el Werkbund retorna de nuevo la relación de participación y de simpatía simbólica entre sujeto y objeto, entre edificio y paisaje. Pero esta actitud nos confirma además que la cultura del Einfühfung no se limita únicamente al Art Nouveau; continúa impregnando muchas de las corrientes posteriores, constituyendo uno de los recursos más peculiares de las artes visuales para resolver su función comunicativa.

Igo